Blanca Fernández Ochoa, la deportista que logró lo imposible

  • A los 11 años entró en un internado para deportistas de invierno en el Pirineo

  • En 1992 se convirtió en la primera española en ganar una medalla olímpica

  • Actualmente atravesaba por algunos problemas económicos y una enfermedad mental

Blanca Fernández Ochoa, conocida por ser la primera mujer española en ganar una medalla olímpica en 1992 ha fallecido a la temprana edad de 56 años tras una vida en la que siempre superó todos los retos. No pudo con el último, su desaparición desde el 23 de agosto que ha acabado con el desenlace más trágico: su cuerpo ha sido encontrado en La Peñota.

Perteneciente a una familia de esquiadores

Blanca nació en Madrid en 1963, pocos meses después de su nacimiento, sus padres se trasladaron desde el barrio madrileño de Carabanchel a la Sierra de Madrid donde tuvo sus primeros contactos con la nieve. Su padre, Francisco Fernández, se convirtió en el gerente de la Escuela Española de Esquí y su madre, Dolores Ochoa, en la cocinera de la institución.

Los ocho hijos de la pareja, siendo blanca la sexta de ellos y primera niña después de 5 hijos varones, se criaron rodeados de nieve "el esquí empezó como un juego. Luego pasó a ser una obsesión. Y más tarde mi profesión" reconoció en una entrevista. Vivieron en el municipio de Cercedilla, cuyos vecinos consternados por la noticia siempre la recordarán con gran cariño. Blanca nunca dejó de ir al pueblo y todos coinciden en su simpatía, amabilidad y sencillez.

Su hermano mayor, Paco Fernández Ochoa, ganó en 1972 la medalla de oro de eslalon principal en los Juegos Olímpicos de Invierno de Sappor. Por aquel entonces, Blanca solo tenía 9 años pero este gran triunfo de su hermano marcaría su vida. Tras esta medalla, varios de los hermanos de Paco fueron enviados a diferentes estaciones para desarrollar sus capacidades y talentos en el esquí. Concretamente, Blanca ingresó a los 11 años en el Colegio Juan March de Viella, en el Valle de Arán, Lleida y pasó a formar parte del equipo de promesas del esquí español.

Una carrera profesional sacrificada y exitosa

Con solo 11 años entró en este centro de entrenamientos con internado para deportistas de invierno en los Pirineos, alejada de su casa, sus amigos y su familia vivió una infancia muy difícil como ella misma reconoció. Sin embargo, su esfuerzo pronto se vio recompensado, ese mismo año y el siguiente, ganó el Campeonato de España infantil de eslalon gigante.

Posteriormente fue campeona de España en 3 ocasiones: en eslalon giante y descenso en 1982, en todos los títulos absolutos en 1983 y en eslalon gigante y combinada en 1989. Dentro de las grandes competiciones internacionales, ganó 4 Copas del Mundo: se convirtió en la primera esquiadora española en ganar una Copa del Mundo durante el gigante de Vail (EE.UU) en 1985, a este triunfo le diguieron los eslalon de Sestriere en 1987 en Italia, Morzine (Francia) en 1990 y Lech en 1991 en Austria.

Además, fue quinta en el eslalon olímpico de Calgary (1988) y cuarta en el mundial de Vail (1989). Blanca fue abandera del equipo español hasta en dos ocasiones en JJOO (1984 y 1992). Su mayor logró llegó en 1992 cuando ganó la medalla de bronce en el eslalon de los Juegos Olímpicos de Invierno de Albertville, convirtiéndose así en la primera mujer española en ganar una medalla olímpica. Tras esta gran hazaña, Blanca Fernández Ochoa colgó los esquís de manera profesional.

En honor a su gran carrera deportiva recibió premios como el Premio Reina Sofía a la mejor deportista española en 1983 y 1988 y la medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo otorgada por el Consejo Superior de Deportes en 1994.

Su vida después de colgar los esquís

Al dejar su vida dedicada a la alta competición que le suponía un gran sacrificio y estar viajando por todo el mundo, se adentró en el mundo empresarial. Junto a varios de sus hermanos, abrió una cadena de tiendas especializadas en artículos de esquí, el negocio no funcionó y decidieron cerrarlo. Sin embargo, emprendieron de nuevo montando una empresa de electroestimulación, algo que tampoco funcionó. Pero ella nunca perdió el ánimo.

Como ha contado en alguna entrevista, el deporte que le apasionaba realmente desde siempre fue el golf. Aseguró que acabó "muy quemada" con el esquí y por un tiempo fue directora de una empresa de eventos llamada Golf and Win. También ha sido asesora de directivos y ejecutivos en una empresa de deportes y instructora de esquí en Baqueira y Navacerrada.

Otra de sus facetas fue la participación en varios programas y realities de televisión como Supervivientes, Splash! Famosos al agua, El conquistador del Aconcagua y El conquistador del fin del mundo.

En cuanto a su vida personal y sentimental, el 18 de julio de 1991, con 28 años de edad, contrajo matrimonio en el Monasterio del Escorial con el italiano Danielle Fioretto, al que había conocido con sólo 14 años de edad cuando esquiaba en Suiza. Se acabaron divorciando en 1994 y contrajo un segundo matrimonio con David Fresneda, propietario de una escuela de buceo en Cabo de Palos, Murcia, con quien tuvo dos hijos, David en el año 2000 y Olivia en 1999, aunque esta unión también terminó en 2007 con un divorcio no demasiado amistoso y bastante tormentosos.

Blanca había recibido otro duro golpe en 2006 cuando falleció su hermano mayor Paco. Los hermanos y medallistas olímpicos estaban muy unidos, durante la enfermedad y los duros tratamientos que recibía su hermano, Blanca decidió raparse la cabeza.

Sus dos hijos son grandes deportistas, en especial su hija, Olivia Fresneda quien es jugadora de la Selección Española de Rugby. Al parecer, Blanca estaba muy centrada últimamente en la carrera deportiva de su hija.