Como cada día, padres y niños de Valladolid, llegan al cole especializado en educación especial, ilusionados, aquí se sienten como en casa, las aulas están adaptadas a las necesidades de cada alumno y el trabajo con ellos es individualizado. El 17 por ciento de los alumnos con discapacidades intelectuales acuden a estos centros, pero ahora el Consejo Escolar amenaza con cerrarlos para que convivan con los demás alumnos en escuelas ordinarias. Un plan a largo plazo con el que quieren transformar el sistema educativo. Algo poco realista para estos padres: ellos defienden un sistema inclusivo, sí, pero en estos centros de educación especial.

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