Estudiando en el móvil: sólo 25 de los 400 alumnos de un instituto de Algeciras disponen de ordenador

  • El Saladillo es un barrio desfavorecido, en el que muchas familias carecen de ordenador

  • Una vez hechas las tareas en los móviles, los alumnos las envían por un pantallazo a sus profesores

En una modesta vivienda del desfavorecido barrio del Saladillo, en Algeciras, un adolescente hace la tarea que estos días le llega del instituto. La hace porque es joven y tiene buena vista, porque sino, le sería imposible. Carece de ordenador, y para estudiar no le queda otra que recurrir a su teléfono móvil. No es una excepción, de los cuatrocientos alumnos de su instituto, el Ciudad de Algeciras, solo 25 disponen de un ordenador personal en sus casas.

"Una gran mayoría no disponen de ordenador en casa", cuenta Eva Cuenca, directora del centro. "El Saladillo es una barriada desfavorecida, y en las preferencias de las familias no entra el tener un ordenador en casa. Sería prioritario que de alguna manera les pudiéramos dar un ordenador a este tipo de alumnado, pero nosotros no disponemos de ordenadores para que estudien".

"El Saladillo es una barriada desfavorecida, y en las preferencias de las familias no entra el tener un ordenador en casa"

Y como no los tienen han recurrido a los móviles. Afortunadamente, la mayoría de los alumnos tienen uno.

"Entre todo el equipo del centro hemos hablado una por una con todas las familias para explicarles como bajar la aplicación del centro", explica la directora."También aplicaciones externas como Classroom o Moddle. Desde el móvil las ven, pero claro, con mucha dificultad. A ver, para algo concreto sí, pero estar dos o tres horas con el móvil trabajando es muy complicado, pero ellos lo están haciendo".

Desde el 13 de marzo llevan funcionando así. Los profesores elaboran tareas de todas las materias, que les mandan a los alumnos. Estos cogen el móvil y se ponen a trabajar. Luego, mandan los deberes hechos a sus profesores. Lo hacen, enviando un pantallazo de la libreta en la que han hecho las tareas.

Los profesores elaboran tareas de todas las materias, que les mandan a los alumnos. Estos cogen el móvil y se ponen a trabajar.

"Es un reto para los profesores y también para los alumnos, está siendo muy complicado", confiesa, Eva Cuenca. "Yo hablo diariamente con muchos alumnos, y algunos te dicen que quieren volver al instituto. Ayer hablaba con una chica con una situación económica desastrosa en su casa, y me decía: ¡tengo unas ganas de volver!. Y yo le dije que yo también tenía ganas de volver, que también me agobiaba este trabajo desde casa".

Pero ese es un túnel del que no ven aún la salida. Ahora trabajan con el segundo trimestre, con el tercero no saben aún que va a ocurrir. Mientras se decide, los móviles de muchos chavales del Saladillo, se han convertido en su cordón umbilical con el sistema educativo. Al menos hasta que esto acabe, o alguien les envíe los ordenadores que necesitan.