El juzgado de Pamplona que concedió la libertad provisional a los cinco miembros de La Manada acaba de citar a Antonio Manuel Guerrero, el guardia civil. Debe explicar la razón por la que pidió el pasado lunes un duplicado de su pasaporte en una comisaría de la policía. El funcionario se lo negó porque ya aparecía el aviso de retirada judicial del documento. Además se le prohibía en el auto pedir cualquier duplicado. El abogado de Guerrero ha explicado hoy que su cliente "por exceso de celo" quiso informarse porque había perdido el pasaporte y quería entregárselo al juez. La policía asegura que no pidió información sino directamente un duplicado. Si el juez determina que se ha saltado las medidas cautelares, volvería a prisión.