Las mejores ciudades europeas para viajar siendo estudiante sin arruinar tu bolsillo

  • Cracovia, la ciudad que Steven Spielberg eligió para filamar su película “La lista de Schindler”

  • En Budapest una habitación compartida con otras 10 personas puede costar unos 26 euros la noche

  • Una de las ciudades que más Erasmus eligen en Italia es Bolonia

La agencia de viajes Rumbo.es ha realizado una selección de destinos europeos que recomienda especialmente a estudiantes donde: “podrán descubrir mundo sin que su cuenta de ahorro se quede en números rojos”.

Budapest: ambiente e historia

Entre los primeros destinos recomendados por la agencia se encuentra Budapest, capital de Hungría, destacando su gastronomía “capaz de dejar impresionado al más exquisito paladar”, además de la ventaja del cambio de moneda de euros a forinto húngaros, en la que la moneda europea sale muy favorecida y donde una habitación compartida con otras 10 personas puede costar unos 26 euros la noche.

Si la opción es el transporte público, el abono de un día que ronda los 9 euros permite moverse por todos los medios. Desde Rumbo.es señalan que uno de los mejores planes que ofrece Budapest es un paseo por el Danubio y que la mejor opción para ahorrar dinero es tomar los barcos que forman parte de la red de trasporte público y dejarse deslumbrar por las impresionantes vistas con el Parlamento de compañero.

Si de fiesta se trata uno de los mejores ambientes universitarios se encuentra en la zona de los conocidos Ruin Pubs, el más conocido es el Szimpla Kert, único en el mundo por su gran tamaño y capacidad. En cuanto a la comida, Hungría es un país muy rico en gastronomía y barato. Uno de sus platos estrella es el Gulyás, guiso de ternera con patatas y verduras, y el Lángos, una masa similar a una pizza a la que le puedes añadir toda clase de toppings.

Vilnius, la capital desconocida de los países bálticos

Un destino que sin duda merece la pena es Vilnius, la capital de Lituania, que cuenta con la universidad más grande del país, por lo que el ambiente universitario está garantizado. Se trata de una ciudad repleta de monumentos que reflejan su mezcla cultural, artística y religiosa, siendo hoy en día hogar de artesanos, artistas y bohemios. Desde la agencia destacan La Puerta de la Aurora, uno de los más importantes y místicos del país porque dicen que la virgen que preside la puerta hace milagros. La colina donde está la Torre de Gediminas es otra de las recomendaciones de visita donde se puede disfrutar de una bonita puesta de sol con vistas a la ciudad.

En cuanto a la moneda, el euro, no se nota un cambio demasiado grande a lo que puede costar la vida en España: una cerveza cuesta 3 euros y un menú en McDonald’s sale por unos 5, una habitación compartida puede costar desde 8 euros y los billetes sencillos de autobús salen por 1 euro, con posibilidad de abonos. En cuanto a museos, la entrada al KGB Museum (Museo de las víctimas del genocidio) para estudiantes cuesta 1 euro y hay otras muchas atracciones culturales que tienen precios especiales para los más jóvenes.

La visita de la República de Užupis, es otro plan low cost recomendado, en el barrio de la capital que se independizó llegando a instaura su propia constitución y parlamento. Pasear por sus calles contemplando los murales de Street Art y visitar las galerías de arte y las tiendas con productos de diseño del lugar.

Cracovia: Ciudad de Historia, cine y cuento de hadas

Cracovia el destino turístico más visitado de Polonia por su encanto, gastronomía, cultura, además de la más económica de Europa para viajar debido a que su cambio de moneda de euros a zloty, bastante beneficioso para el turista (1 euro = 4,33 zloty) y que conserva un increíble legado arquitectónico. Además, es un destino interesante para los amantes del cine, ya que Steven Spielberg la eligió como localización de su película “La lista de Schindler”.

El precio de una habitación compartida son aproximadamente 9 euros y una pinta de cerveza ronda los 2. La tarjeta Krakow Tourist Card, que incluye la entrada a más de 40 museos, el uso del trasporte público, traslado al aeropuerto y a la mina de sal de Wieliczka, así como descuentos en numerosos restaurantes, cines y alquiler de coches cuesta 25 euros para dos días.

Entre los monumentos más destacados está la Plaza de Mercado, la más grande de Europa; la basílica de Santa María, con una fachada gótica de ladrillo; la Lonja de los Paños, con su estilo renacentista; la Colina Wawel, con su castillo digno de cuento de hadas, y el barrio judío, con una amplia oferta gastronómica, museos y locales de música judía.

Toulouse, la ciudad colorida

Conocida como La Ciudad Rosa, por el color predominante en sus edificios y situada al sur de Francia, cuenta con muchas ofertas en cuanto a los vuelos, pero sino, al estar cerca de la frontera con España no es un mal sitio para ir en coche. Posee un increíble patrimonio histórico con la iglesia románica más grande del mundo como protagonista. Destacan los mercados y los puestos de comida en las calles, además de las innumerables tiendas siendo la Rue D’Alsace Lorraine el lugar perfecto para este cometido. Uno de los paseos más bonitos es seguir la orilla del río Garona aprovechando para cruzar el puente San Pedro y ver una de las mejores vistas de la ciudad.

En cuanto a tarifas, una comida en McDonald’s sale por 8 euros (menos aún si hay promociones especiales) y una pinta de cerveza del país son cerca de los 5. Una habitación compartida en el centro ronda los 24 euros y, en cuanto al transporte público, lo mejor es utilizar la bici, aunque un billete sencillo cuesta 1,60 euros y vale para toda la red de transporte (metro, tren, tranvía y autobús).

Bolonia, la ciudad universitaria de Copérnico y Dante

Una de las ciudades que más Erasmus eligen en Italia es Bolonia. Conocida como La Ciudad Roja por el color de la mayoría de sus edificios y tejados, es hogar de una de las universidades más antiguas de Europa. La arquitectura medieval, destaca en los elementos emblemáticos de la ciudad como la Piazza Magiore o Las torres gemelas de Garisenda y Asinelli, sin dejar atrás la llamada “Ruta de los 7 secretos”, en la que los lugares menos conocidos se convierten en protagonistas.

En Bolonia se puede encontrar una habitación compartida por 24 euros, y una pinta de cerveza nacional ronda los 5, disminuyendo el precio en los bares de los barrios tradicionales.

En cuanto al transporte público, el autobús es el medio más importante: un billete de viajes ilimitados durante 24 horas cuesta 5 euros.

Bolonia en concreto goza de muy buena reputación gastronómicamente hablando, en especial por su famosa salsa Bolognesa. Los mejores sitios para degustarla intentando no dejar la cuenta a cero, gastándose alrededor de 15 euros por persona, son Pizza Casa, La Bussola y Due Torri. Para los que cuidan la dieta, pueden comprar los slides de pizza por menos de 3 euros.