Son imágenes inéditas de la Manada, emitidas en exclusiva por 'El Programa de Ana Rosa'. Corresponden a los momentos posteriores a la presunta violación en grupo de la joven. Tres de ellos se han colado en un portal para dormir pero siguen grabando con sus móviles. Entre risas uno enseña una bolsa con un polvo blanco y su amigo lo graba, supuestamente, esnifando cocaína. Están tan tranquilos. Ni rastro de preocupación. Para la acusación el vídeo refleja la impunidad con la que creían contar. Para la defensa, todo lo contrario: demuestra que no habían hecho nada malo.
Justo en esos momentos la joven ya ha salido del portal en el que se cometió la presunta agresión y está llorando en un banco. Una pareja la ayuda y denuncian la violación. Mientras, la Manada sigue ajena a todo. Dos de ellos, los que no están durmiendo en el portal, siguen de fiesta. Uno se come un bocadillo y ligan con otras chicas. A las 8 de la mañana, cuatro de ellos se juntan para correr el encierro y al salir de la plaza de toros los identifica la policía, pero los dejan marchar. Uno dice que es agente de la guardia civil. Ya saben que los buscan y se dirigen a su coche... En esas horas borran algún vídeo del teléfono y se deshacen del móvil de la chica, que habían robado. Entonces son definitivamente detenidos.