Una pareja de guardias civiles estaban haciendo controles rutinarios de alcoholemia en la autovía A.42 que une Madrid y Toledo cuando el conductor de un coche intentó atropellarles. El coche huyó con las luces a oscuras por un polígono industrial cercano tras embestir el coche patrulla.
Se inició un seguimiento del turismo que realizó maniobras bruscas de volante para golpear y sacar de la vía a los vehículos oficiales, continuando campo a través para evitar la detención hasta que los daños inmovilizaron el vehículo.
El conductor bajó del turismo y trató de esconderse en una gasolinera próxima, donde fue detenido por miembros del Cuerpo Nacional de Policía de Parla.
En el asiento delantero del vehículo abandonado los guardias civiles encontraron a una joven maniatada y encerrado en el maletero a un varón con varios golpes en la cabeza, que resultó ser el dueño del turismo.
Ambas personas habían sido secuestradas en Getafe a punta de pistola, arma simulada de la que se deshizo en la huida el autor de los hechos, pero que finalmente recuperaron los agentes.
El detenido, de nacionalidad rumana de 21 años de edad y vecino de Getafe, se le atribuyen delitos de robo con violencia e intimidación de vehículo, detención ilegal, resistencia y desobediencia grave, atentado a agentes de la Autoridad y conducción temeraria. Ya ha pasado a disposición judicial. Tiene nueve detenciones previas por robo con violencia, amenazas y agresión sexual.