Beatriz Zimmermann y Tomás Gimeno: 17 años juntos con varias agresiones y ninguna denuncia

  • Tomás Gimeno mantuvo de forma constante hacia Beatriz un trato vejatorio y denigrante

  • Gimeno no toleraba que su exmujer hubiera rehecho su vida con otro hombre

  • Antes del asesinato ya había agredido en varias ocasiones a la madre de sus hijas

Beatriz Zimmermann y Tomás Gimeno mantuvieron una relación fruto de la cual nacieron Anna y Olivia Dicha relación se rompió hace aproximadamente un año, lo que implicó el cese de la convivencia, residiendo desde entonces Tomás en Igueste de Candelaria y Beatriz junto a sus hijas en Radazul.

Desde ese momento, Tomás mantuvo de forma constante hacia Beatriz un trato vejatorio y denigrante, dirigiéndole a diario comentarios descalificativos, ofensivos y ultrajantes, en particular enfocados a menospreciarla por haber rehecho su vida con una nueva pareja, manifestando además, de forma reiterada, que no toleraba que compartiera momentos con sus hijas, según recoge el auto de la magistrada del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 3 de Güímar.

Según señala El Español, la relación entre ambos empezó cuando todavía eran unos adolescentes, con unos 15 años. Tomás no era un loco ni un monstruo. Como señaló la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, "no es un loco, no es un asesino en serie, es la cara del machismo, de ese hombre que no tolera la libertad de la mujer, su igualdad."

Joaquín Amills, el portavoz de la madre de las pequeñas, ha destacado en varias ocasiones la personalidad narcisista de él, y ha señalado que Beatriz acabó con su relación estando embarazada de Anna, cansada de las infidelidades de este, que mantenía incluso una relación paralela, poniendo punto y final a 17 años de relación.

Tiempo después, la madre de las pequeñas, ya soltera, comenzó a intentar rehacer su vida conociendo a un hombre, Eric, de 60 años, con el que comenzó una relación. Una libertad que Tomás no estaba dispuesto a permitir. No pudo aceptar que su mujer rehiciese su vida, y según consta en las diligencias del caso, profería múltiples insultos hacia Eric: "No quiero que ese viejo cuide de mis hijas".

Unos celos enfermizos cuyo siguiente paso fueron una agresión. El 30 de agosto de 2020, Tomás agredió a la nueva pareja de su exmujer en el parking de un restaurante. Cuando Beatriz intentó impedir la agresión, también la golpeó a ella, llegando incluso a arrastrarla por el suelo agarrándola del pelo. Todo ello fue delante de las pequeñas Anna y Olivia. No podía soportar que su exmujer rehiciese su vida.

En ese momento tanto Beatriz como Eric rehusaron interponer una denuncia. Ella no quería tener más problemas aún con el padre de sus hijas, sobre todo por el bien de ella, aunque en ningún momento llegó a pensar en que podría acabar en este trágico final.

Meses después, otra agresión verbal a Beatriz hizo que esta se decidiese a poner una denuncia algo que finalmente no hizo por el mismo motivo que la primera vez: por el bien de sus hijas. No quería que una detención de Tomás Gimeno agravase la situación.

Este trato machista y el uso de la violencia vicaria terminó con la peor de las tragedias: el asesinato de sus hijas en un plan perfectamente organizado para "provocar un inhumano dolor a su expareja".