El abuso sexual se queda corto y el juez discrepante considera que ella disfrutó. La sentencia ha hecho más profunda la herida de la víctima. Su abogado cuenta que está triste y decepcionada y que por el hecho de que no recurra no lo va a olvidar antes. Ellos le han recomendado que recurra. Recurrirán la sentencia en Tribunal Superior de Justicia de Navarra donde hay más posibilidades que en el Supremo de darle la vuelta a la intimidación y conseguir condena por agresión sexual. El relato de hechos probados de la sentencia de La Manada describe una violación tal y como la sociedad la entiende. En el delito de abusos sexuales en su tramo más alto se concibe la penetración pero la diferenciación con la agresión sexual es la intimidación y la violencia. En la misma línea recurre el Gobierno de Navarra que para argumentarlo explica que la sociedad no puede entender que no hay intimidación cuando cinco hombres rodean a una joven de 18 años en un espacio sin salida y angosto. La violencia sexual es violenta y no necesita que se analice si hubo una amenaza verbal, manifiesta, visible o futurible. Está implícita en la acción. Con ese criterio se estudian los recursos que otros jueces tendrán que valorar en esa delgada línea divisoria entre el abuso sexual y la agresión sexual. El abogado de los cinco condenados recurrirá porque dice que están absueltos de agresión sexual y no se ajusta a derecho condenarles por lo que no les han juzgado. Los expertos creen que no hay problema cuando el delito por el que te condenan es de menos pena de cárcel. En cualquier caso él aprovechará para pedir la libertad provisional mientras no hay sentencia firme. Asegura que están consternados y abatidos Los cinco lo vivieron de diferente manera ayer, unos vieron la lectura en directo por videoconferencia, otros no quisieron ni verla. No hay fecha pero con el 2º grado podrán pedir permisos esporádicos. No están tasados, se ganan pero hay que tener buena conducta, informe favorable y haber indemnizado a la víctima. También se ganan con cursos. Pero no están asegurados. Sí tendrán la libertad condicional cuando hayan cumplido 6 años y medio de condena. Llevan casi dos.