Trenes de DANAS, la nueva normalidad meteorológica en España por dos cambios en la atmósfera
La llagada de más masas de aire helado del polo junto a la mayor temperatura del Mediterráneo favorecen la generación de DANAS en nuestra latitud
Un experto en medio ambiente advierte del futuro que nos espera tras la DANA: "Cada vez ocurrirá con más asiduidad"
Los expertos llevan años alertando de que un Mediterráneo más cálido aumenta el potencial de lluvias intensas convertidas en DANA. Sin embargo, no es un factor determinante porque para que produzcan fenómenos adversos es necesaria inestabilidad en altura. Un segundo factor que ya está aquí al modificarse la corriente de chorro polar que cada vez más frecuentemente se adentra sobre la península.
El meteorólogo de Mediaset, Eduardo Abión, describe lo que ya puede considerarse como una "nueva normalidad". Para este experto esto va a seguir siendo así por la convergencia de estos dos factores. En primer lugar, lo vemos en capas altas de la atmósfera con la entrada de la corriente en chorro polar debido a la "meandrización" de esta capa de aire frío que cada vez llegan con más frecuencia hasta nuestras latitudes.
Cambios en el clima favorecen el aumento de DANAS en España
Y, en segundo lugar, lo encontramos en la temperatura del mar, del mar Mediterráneo, este caso actualmente unos 22, 24 grados, 2 o 3 grados más de lo que sería normal en el mes de octubre y esto finalmente es más evaporación en capas bajas, en definitiva más combustible para que estas tormentas y estas lluvias torrenciales sean más numerosas.
Lo saben bien los vecinos de localidades como Paiporta, en Valencia, uno de los epicentros de la DANA del pasado 29 de octubre. Las riadas arrasaron con las infraestructuras que salvan el Barranco del Poyo, la arteria mortal que inundo todo a su paso al desbordarse.
Más allá de los problemas para pasar de un lado a otro del pueblo, los habitantes de Paiporta miran con miedo el cielo temerosos de que una nueva DANA vuelva a dejarles sin nada.
Mientras tanto, los comerciantes intentas recuperar la normalidad de sus negocios, muy afectados por las riadas y con una clientela a la que la desgracia ha afectado no solo a sus bolsillos, sino también a su estado de ánimo.