Buñol se vuelve a teñir de rojo en la Tomatina como símbolo de recuperación tras los daños sufridos por la DANA
La Tomatina celebró su edición más internacional con 22.000 asistentes y 120.000 kilos de tomates
La Tomatina vuelve a bañar a Buñol de rojo con 130 toneladas de tomate y tras dos años de espera
Parece que fue ayer, pero ya ha pasado un año y Buñol ha vuelto a celebrar su fiesta más internacional tras los Sanfermines. La Tomatina ha congregado hoy a 22.000 participantes que se han lanzado 120.000 kilos de tomates en una batalla que agotó el aforo máximo y que este año se celebró bajo el lema “Tomaterapia”.
La cita, en la que no faltaron disfraces, gafas protectoras y la única regla de acabar empapado en tomate, atrajo a visitantes de todo el mundo, desde India hasta Australia. A pesar de la intensidad de las imágenes, horas después en el pueblo apenas quedaban rastros de la “batalla roja”, más allá de los últimos trabajos de limpieza en sus calles.
Bajo el lema "Tomaterapia", Buñol quiso además proyectar esta edición como un símbolo de recuperación tras los daños sufridos por la DANA que golpeó duramente al municipio. La fiesta concluyó con normalidad y con el compromiso de devolver a las calles su aspecto habitual, mientras la Tomatina reafirma su lugar como una de las celebraciones más internacionales de España.