La jueza de la DANA añade grabaciones clave, incluida la de un hombre con un 66% de discapacidad que murió sin poder ser ayudado
Este viernes se han incorporado a la causa las conversaciones que mantuvieron un anciano que residía en un bajo de Catarroja
Un asesor de Salomé Pradas declara ante la jueza de la DANA que ya se hablaba del envío de la alerta horas antes de su lanzamiento
El sumario abierto en el Juzgado de Instrucción 3 de Catarroja en Valencia, que investiga la gestión de la DANA , ha incorporado nuevos testimonios en forma de grabaciones que dejaron usuarios del servicio de teleasistencia que fallecieron ante la imposibilidad de escapar de las riadas que asolaron la comarca de l'Horta Sud.
Este viernes se han incorporado a la causa las conversaciones que mantuvieron un anciano que residía en un bajo de Catarroja y sus familiares con el personal de teleasistencia, que trató, sin éxito, de alertar a policía y bomberos para que realizasen el rescate, a las que ha tenido acceso. Esta víctima tenía un 66 % de discapacidad y vivía solo en una vivienda de tres plantas, pero su condición física le impidió ascender y finalmente pereció en el interior de su domicilio.
Este hombre pulsó el botón de la teleasistencia a las 19:30 horas, cuando el agua alcanzaba medio metro en el interior de su vivienda, según explicó él mismo a su interlocutor, quien le recomendó buscar un sitio elevado mientras telefoneaba a sus hijos. " Es que a lo mejor no pueden venir en coche" "Lo sé, pero es que no cogen el teléfono en los servicios de emergencias, están saturados. Deme un momento", le respondió el personal de teleasistencia.
Los familiares de este hombre se movilizaron para tratar de auxiliarle, pero su hija quedó atrapada en la pedanía valenciana de La Torre y otro familiar, que residía en la misma calle, tampoco pudo siquiera acercarse a la vivienda.
En la transcripción de la conversación quedan reflejados las decenas de intentos infructuosos del personal de teleasistencia de contactar con el 112. "Sube por minutos el agua, yo no sé si mi padre cogiéndose a las paredes..., el pobre, es que tiene un 66 % de discapacidad", insistió la hija en una de las llamadas.
En otra de las comunicaciones, los técnicos de teleasistencia tratan de tranquilizar a la hija del hombre atrapado, aunque confiesan: "Está todo el mundo igual, pero es que no… es que a las siete de la tarde ya ha habido accesos a domicilios que los bomberos nos han dicho que no podían acceder (sic)"