Aída Nízar adora su vida en un reality chileno y se gana el odio de muchos compañeros

telecinco.es 23/03/2019 11:40

Su vídeo de presentación ya advertía que iba a dar guerra y lo que promete Aída, lo cumple. En el minuto dos del primer programa, la participante española ya tuvo un desencuentro con una compañera, Mane (conocida por todos los amantes de 'Acapulco Shore' y 'Super Shore'). Resulta que a Mane no se le ocurrió otra que cosa que escupir frente a los ojos de Aída. Y claro, esa "vulgaridad" (así lo denominó ella) no iba a pasar por alto.

En poco tiempo, el concepto que Aída tiene del show empezó a traerle problemas con algunos compañeros. Comenzó a promulgar en tierras latinoamericanas su archiconocido lema "adoro mi vida" (que en Italia se convirtió en "adoro la mia vita") y algunos no entendían ese "exceso de protagonismo" de "una señora vieja" "tan grandota y tan pendeja" que "debería ir a un asilo" (palabras de sus compañeros). "Mandaría a esa señora a su país para que no fuera tan intensa", llegó a decir Tere. En resumen, en el primer programa Aída…: discutió con Mane, hizo llorar a Tere por un comentario (le dijo "cállate, piernas de elefante"), llamó payaso a Dino y fue amenazada por el líder. Vamos con esto.

Aída no se iba a dejar amedrentar por los comentarios. No conocen a Aída. Su fuerte carácter le jugó una mala pasada y a las pocas horas de comenzar la aventura el grupo se dividió en dos equipos que se enfrentaron en un juego. De cada equipo salió un líder y el jefe del grupo de Aída la condenó. Esto viene a significar que la puso en la cuerda floja y si perdían el juego, Aída sería la primera nominada. Pero su equipo ganó y la Nízar quedó fuera de peligro. Pero claro, esto ya era el primer síntoma de que la tienen enfilada.

Y es que ella no duda en decir todo lo que piensa y en encararse con quien haga falta. Sus mayores broncas vienen por el objetivo del programa: resistir. El reality viene a ser de supervivencia extrema: duermen en un saco a la intemperie, comen gusanos, no tienen jabón… Eso sí, entra en juego el factor 'tentación'. El premio en juego asciende a medio millón de dólares y solo será para uno de ellos. ¿Qué es lo que pasa? Que los conductores del espacio tientan a los participantes de manera grupal e individual. Es decir, les ofrecen comida, un baño caliente, una cama en condiciones… a cambio de dinero (que se descuenta del bote final).

Y claro, algunos caen en la tentación y eso a Aída no le gusta nada porque "están jugando con su dinero". Frases como "¿a qué hemos venido? A resistir, ¿no?" se escuchan constantemente en boca de Aída cuando se siente indignada ante las decisiones de sus compañeros. De hecho, uno de los mayores enfrentamientos lo tuvo con Eleazar e Ignacia cuando, en la primera noche, decidieron descontar del premio final 4.000 dólares por cenar sushi y dormir en una cama (que aprovecharon para intimar). Aída le llegó a decir a Nacha "tu madre estará orgullosa de ver cómo te regalas con el primer hombre que dice que tienes los ojos bonitos". Sí, "se enamoraron" en menos de 24 horas.

Otros de los gloriosos momentos de Aída en el reality son: llamar Pumiki (y decirle que se vaya a lavarse el pelo) a Ji Hui, llamar Michael Jackson a Mane (por su nariz), decir que el cuerpo puede aguantar 21 días sin comer y que ella lo aguantó (participó en 'Supervivientes 2011') y su encuentro con Joaquín Méndez en el que, después de darse dos besos de presentación él le dijo "mucho gusto conocerla, Aída" y ella contestó "lo sé". Pero Aída no está sola, tiene algunos apoyos y de su lado están Álex (hermano de Charlotte Ganiggia de 'GH VIP 4'), el youtuber Fritanga e Isaac Torres (también español y que participó en la tercera edición de 'Super Shore').

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