Enamorado y piloto en sus ratos libres: la vida de Alejo Sauras 13 años después de 'Los Serrano'

  • Alejo Sauras ha logrado una exitosa carrera en el mundo de la interpretación tras 'Los Serrano'

  • El actor mallorquín también es piloto y comparte vida con la también intérprete San Yélamos

La mayoría le conocimos como Raúl, el mejor amigo de Marcos en Los Serrano. Hijo de Fructuoso Martínez (Fiti) y Candela Blanco, el personaje interpretado por Alejo Sauras era uno de los secundarios más querido de la exitosa producción. Han pasado 13 años del final de la serie y su carrera desde entonces ha sido imparable. Ahora, vive convertido en un exitoso actor, está enamorado y compagina su profesión con su otra gran pasión: pilotar aviones.

A diferencia de otros compañeros de reparto, Alejo Sauras ha continuado dedicándose a lo que más le gusta: la interpretación. Y aunque su participación en Los Serrano fue la que consiguió que diera su salto hacia el estrellato, lo cierto es que en su currículum había varias importantes producciones previas a esta serie.

Alejo nació en Mallorca, pero pronto se mudó a Madrid, donde pasó buena parte de su adolescencia. Empezó varios estudios, sin embargo, el mundo de la actuación era lo que más le llamaba y acabó dejándolo todo por la interpretación. Mientras se formaba en arte dramático, empezó a estudiar japonés, idioma que habla con bastante fluidez y que le permitió aceptar papeles de obras niponas.

Su gran salto televisivo se produjo en 1997 – seis años antes de Los Serrano - con otra de las series más recordadas del panorama nacional, Al salir de clase. En ella dio vida a Santi, durante cuatro de los cinco años que permaneció en antena la serie de Telecinco. Su debut en la gran pantalla llegaría tan solo un año después, en el 98, de la mano de Salvador García Ruiz y su filme Mensaka, páginas de una historia.

En todos estos años, Alejo Sauras no ha dejado de trabajar, tanto en cine, como en televisión y teatro. Entre sus últimos proyectos destacan la serie de Televisión Española, Estoy Vivo, la cual le ha valido para llevarse a casa un Fotograma de Plata y un Premio de la Unión de Actores y Actrices; y la obra teatral Edipo a través de las llamas, de la que recientemente se despedía.

La vida en este mundo le ha dado muchas alegrías y su carrera no parece estar abocada al fin. Sea como fuere, si en un futuro las cosas se torciesen o si él mismo decidiese apartarse de los escenarios, Alejo Sauras tiene claro a lo que le gustaría dedicarse.

"Estudié Electrónica de Comunicaciones y aprobé unas oposiciones de técnico de areonaves para Iberia. A mí siempre me ha apasionado la aviación y quería ser piloto. De hecho, ahora lo soy, porque de vez en cuando alquilo un avión y me doy un paseo. Tuve que estudiar bastante para sacarme el título, y lo hice gustosamente. No cuestan las cosas que nos gustan", contaba hace tiempo en una entrevista para El Periódico.

Más tarde, desvelaría que le hubiera gustado dedicarse plenamente al mundo de la aviación, algo que le viene de familia, pues entre los Sauras hay varios pilotos comerciales. Sin embargo, debido a un par de dioptrías en un ojo no pudo hacerlo y la de piloto acabó convirtiéndose en una profesión frustrada que practica en sus ratos libres, pues sí que puede manejar avionetas.

Enamorado y muy discreto: la faceta más personal y privada de Alejo Sauras

Alejo Sauras es uno de los actores más discretos del panorama nacional. El intérprete de 42 años es bastante celoso de su intimidad y apenas comparte aspectos de su vida privada. Desde hace varios años, quien diera vida a Raúl Martínez en Los Serrano sale con la también actriz San Yélamos, con quien compartió set de rodaje en la película La habitación de Fermat y años más tarde en Solo Química.

Tanto ella como él cuidan mucho todas las publicaciones que hacen de su vida en pareja. De hecho, en sus perfiles apenas hay fotografías en las que se les pueda ver juntos y casi todas son rodeados de amigos.

No obstante, los intérpretes no se esconden y es frecuente ver cómo ambos se dejan comentarios y numerosas muestras de cariño en sus respectivas publicaciones. También comparten recuerdos de sus viajes en pareja, fotografías con sus perros o disfrutando del enorme jardín con piscina de la casa que comparten.