Así es la espectacular casa de campo de Macarena Gómez y Aldo Comas

  • Uno de los sueños de la pareja era tener una casita a las afueras con muchos animales

  • Caballos, ovejas, emús y hasta alpacas, son algunos de los compañeros de casa del matrimonio y su hijo

  • La extravagante casa es su lugar de desconexión y donde tuvieron la suerte de pasar el confinamiento hace dos años

La actriz de 'La que se avecina' Macarena Gómez y su marido Aldo Comas son una de las parejas más extravagantes del panorama español. Su personalidad y su estilo marcan tendencia ya sea en la pasarela o en su propia casa. El matrimonio ha visto cumplido su sueño de tener una “casa-granja” gracias a su casa de campo en el Alto Ampurdán.

En su molino del siglo XVII de esta zona de Gerona, Macarena, Aldo y el hijo de la pareja, Dante, conviven junto a Carnito, Pirulín, Mantequilla, Limusina, Melchor, Gaspar, Baltasar, Vaca Barbie… algunos de sus adorables animales exóticos. Además, la casa tiene un estilo muy particular y barroco, muy en la línea de los gustos de la familia. Cuando el cuidado de la masía y de los animales se lo permiten, Macarena aprovecha su rincón favorito para leer y Aldo, para dar rienda suelta al artista que lleva dentro en su taller.

Macarena, Aldo y Dante aprovechan los fines de semana, puentes y vacaciones para alejarse del ruido de la gran ciudad y respirar aire puro en el campo junto a sus animales. Fueron de esos afortunados que tuvieron la oportunidad de pasar el confinamiento en plena naturaleza ¡Descubrimos la casa de campo de la familia, donde más de uno se mudaría!

La casa de sus sueños

La pareja ha visto cumplido uno de sus sueños más deseados con esta casa de campo. Tanto Aldo como Macarena se declaran amantes de los animales. Este molino del siglo XVII se ha convertido en la vía de escape de la pareja. En ella encuentran la paz que necesitan, alejados de sus estresantes trabajos y del día a día en la ciudad.

Aunque la casa no es muy grande tienen un gran terreno, donde Aldo disfruta al máximo de los quehaceres del campo, que no son pocos. Es habitual que Aldo se enfunde las protecciones correspondientes y comience a desbrozar la finca. ¡Toda una desconexión!

En el exterior de la casa tienen montada una pequeña gran familia, en la que cuentan con varios perros, cerdos, ovejas, caballos, emús o alpacas. La pareja y su hijo Dante están verdaderamente implicados en el cuidado de sus animales, a pesar del trabajo que dan.

Además de la casa, los establos y el amplio jardín, la parcela, cuenta también con un pequeño lago o estanque con un embarcadero desde donde se puede disfrutar de un atardecer enigmático.

El interior de la casa de piedra está decorada por ambos. Macarena siempre ha estado muy vinculada al diseño, pues desde bien pequeña, su madre despertó su interés por la decoración.

Este refugio tan especial para la familia respira estilo en sus todas sus paredes, suelos y estancias. La casa es reflejo de su propia personalidad, en donde juntan diferentes estilos con una gran imaginación. Priman los colores vivos y los estampados que combinan a la perfección con el color azul de salón y muebles de estilo nórdico.

Muebles rústicos junto a modernos, cristal combinado con madera... Este recóndito lugar al que la familia se escapa siempre que puede, está lleno de detalles y objetos personales combinados con muebles de diseño y una decoración muy cuidada.

El arte es una de las grandes pasiones de la pareja, aunque no coleccionan grandes cosas, los cuadros son su perdición y cualquier pared puede ser el lugar perfecto para una obra artística.

Los rincones favoritos de Macarena y Aldo

Durante el confinamiento hace dos años la pareja tuvo la oportunidad de vivir el encierro en su casa de campo, junto a su hijo y sus animales. Durante ese periodo de tiempo conectaron con ellos mismos y con su maravillosa casa. Macarena sacó tiempo para leer, disfrutar y desconectar de aquella rutina en uno de sus rincones favoritos. Rodeada de naturaleza, con una pequeña mesa, una bicicleta antigua y un coche infantil, la actriz descubrió la felicidad con muy poco.

Por su parte, Aldo vio nacer su vena artística y construyó un estudio donde da rienda suelta a su nueva faceta profesional. El instructor de vuelo ha encontrado una nueva vocación, artista. En su estudio ha creado grandes obras de arte que ya cuelgan en paredes. Le gusta demostrar la belleza del mundo a través de los símbolos. Aldo está comenzando también con la escultura.

Visto lo visto, la pareja ha cumplido su sueño de tener una espectacular casa de campo donde desconectar de sus estresantes vidas para meterse de lleno al cuidado del campo y sus animales.