Cristina Rodríguez: "La industria de la moda es una enemiga para el feminismo"

telecinco.es 01/12/2018 11:23

Está contenta y se le nota en su mirada. Nos recibe en la editorial que le ha dado la oportunidad de escribir 'De mujer a mujer', un libro en el que reflexiona sobre el alma femenina en general, con sus complejos, sus inseguridades y sus miedos, pero siempre con orgullo femenino. Y no lo hace sola porque a su lado se encuentra Sara Brun, la amiga que le ha acompañado en este proyecto y de la que se nota que está orgullosísima, no sólo por compartir autoría del libro sino también por poder tenerla en su vida.

Ambas vestidas de rojo y con un rico desayuno en la mesa me esperan con una sonrisa. "¿Vienes de Telecinco, me pregunta Cristina a la vez que asiento con la cabeza. "Qué buenos momentos he pasado yo allí", continúa diciendo como una premonición de una charla tan didáctica como divertida.

El olor a libros lo pone el propio lugar, pero Cristina, que se me mueve como pez en el agua con los medios, sabe que no sólo hablará de su obra literaria. Ella es una mujer todoterreno que lo mismo te cuenta su opinión sobre el feminismo, que te comenta quién es su favorito en esta edición de 'GH VIP' o pide que le den el Goya por su trabajo en cine como figurinista de una vez por todas. Con Cristina el espectáculo está puesto sobre la mesa y hoy hay un libro presidiéndola...

Ya te habías estrenado como escritora con ‘Como no ser una hortera de bolera’ pero ¿cómo ha sido compartir experiencia con Sara Brun?

Cristina: Mejor que te cuente Sara, porque para mí ha sido maravilloso, pero sin la ayuda de ella este libro habría sido imposible de sacarlo.

Sara: nos conocemos las dos muy bien y ambas sabíamos lo que ibamos a contar. Cuando nos propusieron hacer este libro lo que hicimos fue plasmar en él los temas que Cristina y yo hablamos como mujeres desde el corazón y en primera persona. Así en temas como el feminismo, la maternidad o la amistad cada una da su punto de vista. No ha sido difícil porque ya hablábamos antes todos los días.

Cristina, ¿de dónde has sacado tiempo para escribirlo?

Yo no tengo nada en esta vida nada más que capacidad de trabajo. El libro es de las dos porque yo no podía afrontar un libro sola. Ha sido muy bonito que el libro sea de las dos porque somos amigas y hermanas, pero de los mismos temas tenemos sentimientos completamente diferentes. Eso es muy interesante. El tiempo se saca de los domingos, los fines de semana…. si quieres, siempre se saca tiempo.

¿Por qué recomendarías ‘De mujer a mujer’?

Sobre todo va a ayudar a las mujeres a conocerse y a no tener miedo. Es un libro para ser libres. Si yo tuviera que decir qué te va a pasar con este libro, te diría que cuando lo termines vas a hacer lo que te dé la gana, que ya es mucho.

En el libro se habla de feminismo, de su importancia y del momento actual que vivimos, incluso tú afirmas que decides defenderlo con tacones y pintalabios rojo…

Nosotras, Sara y yo, somos feministas. Yo llevo tacones, tengo juguetes sexuales, me pongo los labios de rojo, no salgo de casa sin maquillar y lo hago porque me da la gana, no porque me obligue nadie sino porque yo lo decido.

Vengo de una familia especialmente feminista aunque ellos no lo sabían. En mi casa nunca ha habido diferencias entre hombres y mujeres. Fue cuando llegué al mundo laboral cuando viví eso, la desigualdad. Por ser chica me trataban diferente y yo quiero ser feminista con un tacón de 10 centímetros, pero no quiero que ninguna amiga me juzgue por ello.

¿Qué queda por hacer?

Pues TODO (contestan Cristina y Sandra a la vez y al unísono). Pensamos que todo está hecho porque vivimos en nuestro micromundo. ¿Sabes lo que me enseñó ‘Cámbiame’? Que existen otras realidades que yo no conocía, otros mundos. Hay pueblos pequeños donde es muy difícil ser gay y ser mujer, por lo que queda mucho por hacer aquí y fuera de aquí. Las nuevas generaciones están relajadas, pero tienen que luchar. Muchos jóvenes, por ejemplo, entienden que el amor es posesión cuando eso es una mentira.

¿Crees que la industria de la moda ha sido o es una enemiga para la mujer?

La industria de la moda es una enemiga para el físico de la mujer. Si lo es para el físico de la mujer lo es para el feminismo. En el momento en que yo para ser valorada tengo que tener una 36 estoy jodida, porque yo tengo que tenerla pero tú no. Se está cambiando, pero en el momento en el que los cánones de belleza son mujeres escuálidas estamos jodidas. El mundo de la moda lo dominan los hombres, las mujeres cosen toda su vida pero los hombres diseñan.

En el cine he trabajado en toda mi vida con cinco directoras y como directoras de fotografía sólo dos y siempre he pensado…Qué raro que en 70 películas no me haya cruzado con más mujeres, qué raro que sólo las mujeres quieran ser peluqueras. En 'Vivir dos veces, la última película en la que trabajo, una chica me dijo que empezó en cámara pero se tuvo que ir por el machismo que había en el equipo de cámaras. El machismo que hay es impresionante, me dijo.

¿Cuál es el secreto para que te nominen a 5 Goyas?

Pues hacer 70 películas (ríe). Que no te lo den no sé… Ya no sé qué más hacer…

¿Crees que el reconocimiento está en el premio o en el trabajo?

El reconocimiento está en que me siguen llamando, pero quiero tener un Goya… Por favor, por favor y POR FAVOR. Creo que ya me toca, bueno me tocaba hace años. Aunque no me den el Goya me sigue sonando el teléfono. Por ‘Superlópez’ me tienen que nominar porque el vestuario es espectacular.

¿Qué te da el cine que no te da la tele?

Mira yo quiero hacerlo todo. Yo quiero hacer tele y cine. Suponiendo que yo pudiera escoger, si tuviera una varita mágica, yo quiero hacer las dos cosas. Porque la tele es jugar y el cine es crear. En el cine tengo más responsabilidad y en la tele tengo menos responsabilidad pero sí más reconocimiento. En la tele estás más protegido y es más fácil porque tienes a un equipo de 60 personas que miran y trabajan por y para ti.

¿La echas de menos?

Claro, a mí me encanta la tele.

¿Y cómo viviste el final de ‘Cámbiame’?

Triste. Muy triste. La última etapa fue un poco triste pero me ha dado tanto ese programa. Es como todo porque dices, a lo mejor he tenido un marido maravilloso durante diez años pero en los últimos seis meses no ha sido todo tan bueno. Pesa más lo otro. A mí me dio mucha pena que acabara y los últimos cambios a mí me afectaron emocionalmente, pero he sido muy feliz. Iba por la calle y la gente me paraba para decirme que les había ayudado. (Se emociona y no puede evitar que se le escapen unas lágrimas). ¡Ya me has hecho llorar!

¿Participarías en algún reality?

Largando de ellos haría todo, pero nunca participaría como concursante porque no soy carne de reality. Yo detesto la gente sincera. El sincericidio de “yo digo las cosas a la cara” lo odio. ¿Quién te ha pedido que me digas las cosas a la cara? No me interesa. Prefiero que la gente me critique por detrás. Cuando hago pelis y está mi equipo en una sala y yo voy a entrar, desde fuera hablo. ¿Sabes por qué? Porque no quiero escuchar una conversación que no quiero oír.

Vicente Aranda me dijo que una vez se puso los cascos antes de dar motor y oyó una conversación que no quería escuchar sobre él. El director me comentó que ahí entendió que sólo podía ponerse los cascos después de decir acción. Lo mismo pienso yo. Yo evito el conflicto… Por ejemplo, en ‘Gran Hermano’…

¿Estás enganchada a ‘Gran Hermano VIP’?

Estoy enganchadísima. Me acuesto a las tantas viéndolo.

¿Y tienes favorito?

A mí me gustaba mucho Ángel Garó. Yo creo que ha estado desafortunado con comentarios, seguro. Y es clasista, seguro. ¿Pero sabes qué? Es un tipo que tiene talento. Que tiene recorrido y tiene profesión. Que ha trabajado como un cabrón y a mí me gusta la gente que trabaja. No soporto la gente vaga y la gente sin profesión. Sé que la vida es que a la gente que no pega ni chapa le vaya bien, pero si yo pudiera escoger decidiría a quién le va a ir bien en la vida y a quién mal. Porque hay gente que se deja los cuernos ganando 600 euros y hay otros que ganan mucho sin talento y eso, eso no me gusta. Nada.

Vale, si eres fan de esta edición, esta pregunta es obligada: ¿Miriam Saavedra o Miriam SaavedraMónica Hoyos

Me pusieron a parir en las redes porque yo defendía a Mónica. Ya dejé de hacerlo. Yo creo que vivir con Miriam tiene que ser insoportable. Le gustará a la gente, se habrán portado mal con ella, pues seguramente, pero imagínate irte con ella un fin de semana. Te tiras por la ventana. Prefiero irme con Mónica un finde. “¿Tú qué opinas?”, me dice mirándome directamente y dejándome con los pantalones bajados porque no quiero decirle que mi favorita es Miriam, aunque lo sabe sin decírselo.

¿Te queda algún sueño por cumplir?

Una serie que hemos escrito y se llama ‘Winners’. La hemos hecho tres mujeres: Sara, otra amiga y yo. La serie va de mujeres poderosas no por el dinero que tienen. Ojalá podáis verla pronto… porque las mujeres también queremos MANDAR.