Así son Alejandra, Eugenia, Claudia, Kike y Carlos, los hermanos del sexto hijo que va a tener Bertín Osborne

Bertín Osborne va a ser padre por sexta vez a los 69 años. La novia del presentador de ‘Mi casa es la tuya’ se encuentra embarazada de tres meses. Alejandra, Eugenia, Claudia, Carlos y Kike son los otros hijos de Bertín.

El presentador, que ya es abuelo, volverá a ser padre a su avanzada edad. Sus tres hijas mayores, Alejandra Eugenia y Claudia Osborne fueron fruto de su primer matrimonio. La difunta Sandra Domecq fue el gran amor de la vida de Bertín. Con ella se con tan solo 22 años y, pronto comenzarían a tener descendencia. Aunque su historia no duró muchos años, Bertín continúa guardándole un cariño muy especial.  

Debido a su juventud, en más de una ocasión ha reconocido haber sido un padre ausente con sus hijas, aunque en la actualidad mantiene una estrechísima relación con todas ellas. También con Ana Cristina, la hija que Sandra Domecq tuviera años después junto a Fernando Portillo y a la que quiere como a otra más de sus hijas.

A esta ya de por sí familia numerosa se le unen Carlos y Kike, los hijos que el cantante tuviera junto a Fabiola Martínez, quien por otro lado no ha tardado en reaccionar a la nueva paternidad de su exmarido.

Es la mayor de las hijas del presentador, aunque antes de su llegada a este mundo, Sandra Domecq y Bertín Osborne tuvieron otro hijo. Cristian nació con una malformación en el hígado y falleció apenas unos días después dejando a la familia y a los recién casados completamente devastados.

La llegada de Alejandra, en 1978, lo cambió todo. A sus 45 años, es una mujer muy familiar y discreta, también la más desconocida de todas las hijas de Bertín. Su sueño era ser bailarina, como lo era su madre, y aunque también se dedica al arte, nada su profesión nada tiene que ver con el baile.

Comprometida con el cáncer desde que muriera su madre, actualmente se dedica al interiorismo y al diseño corporativo. Está separada y es madre de tres hijos, Santiago y los gemelos Fausto y Valentina.

La mediana y más conocida de las hijas de Bertín. Estudió psicología, pero acabó perdiendo la vocación y no terminó sus estudios. Ha abierto varios negocios y también se dedica a las redes sociales, donde es una importante prescriptora de moda nacional.

Tiene 37 años y es madre de tres hijos fruto de su relación con su exmarido, Juan Melgarejo, del que se separaba en el verano de 2021. Miguel Barreiro es su nuevo amor y aunque lo suyo cada vez está más consolidado, la pareja prefiere ir poco a poco.

Hace unos meses, la propia Eugenia nos contaba en exclusiva que los pequeños Juan, Sandra y Tristán creen que Miguel es solo un buen amigo.

Claudia, de 34 años, es la última de las hijas que Bertín tuviera junto a Sandra Domecq. Hace dos años contrajo matrimonio con José Entrecanales, con la que hace uno tuvo a Micaela, su primera hija en común.

Estudió derecho en la Universidad Complutense de Madrid y posteriormente se masterizó en la Boston University School of Law. También ha estudiado psicología. Siente una absoluta pasión por la moda y ha abierto varias empresas enfocadas a ella.

Norberto Enrique Ortiz Martínez, conocido por todos como Kike, es el primer hijo de Bertín Osborne y Fabiola Martínez. La suya es una auténtica historia de superación. Nació un año después de que sus padres contrajeran matrimonio. Un bebé llegaba al mundo con una parálisis cerebral que terminó marcando sus vidas. Actualmente tiene 16 años.

A raíz de la enfermedad de su hijo, quien nació de forma prematura a causa de una listeriosis y necesitó estar hospitalizado durante tres largos meses en el Hospital madrileño de La Paz, la pareja decidió crear una fundación en su honor para poder orientar y ayudar a las familias que, como la suya, tuvieran hijos con lesiones cerebrales.

Carlos, el segundo hijo de Fabiola y Bertín, nació en 2008, tan solo un año después que su hermano. A pesar de ser el pequeño, Bertín y Fabiola aseguran que su hijo se ha volcado siempre en los cuidados de su hermano y ha sabido adaptarse siempre a la situación. El verano pasado, Carlos, adolescente al que siempre han definido como una persona alegre, simpática y espontánea, asistió a un campamento militar para “aprender valores” y “disciplina”.