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Gustavo González y María Lapiedra ya son marido y mujer. El colaborador de 'Sálvame' y la actriz se han casado por sorpresa en una boda íntima y secreta El enlace civil tuvo lugar el pasado 7 de enero, tal y como publica la revista 'Diez Minutos' en exclusiva en su último número.
La pareja ha decidido poner el broche de oro a su historia en el ayuntamiento de Sant Vicenç de Montalt (Barcelona) con una ceremonia a la que no acudieron ni los hijos del primer matrimonio del paparazzi ni las de la intérprete, pero en la que sí que estuvo presente el citado medio. La hija de los recién casados, la pequeña Mía, sí que acompañó a sus padres en este día tan especial, donde jugó además un papel muy importante.
María y Gonzalo han decidido casarse en secreto y bajo la atenta mirada de un reducido número de asistentes. No obstante, esta íntima ceremonia es solo una antesala de la gran fiesta que están preparando y que tendrá lugar el próximo 7 de mayo en una multitudinaria ceremonia que ya están organizando junto a una conocida 'wedding planner'. Mientras lega el esperado día, los televisivos han querido formalizar su situación casándose por lo civil.
Para la ocasión, la exconcursante de 'Supervivientes' María Pasqual – su auténtico nombre - ha apostado por un moderno look nupcial. Un conjunto de camisa y pantalón firmados por el diseñador catalán Jordi Dalmau, gran amigo de la pareja. En concreto, un dos piezas en color blanco roto compuesto por un sencillo pantalón de traje y una original camisa con cuello de estilo oriental y manga con brazos de tul.
Gustavo, por su parte, lució un traje de color gris, con chaleco azul marino, camiseta blanca y deportivas. Look creado por el mismo diseñador, que será quien también quien les vista el próximo mes de mayo.
Según el citado medio, la celebración fue de carácter especialmente íntimo debido a las restricciones derivadas de la pandemia del coronavirus y al alto número de incidencia provocado por la sexta ola. Precisamente por culpa de la covid-19, el matrimonio ha tenido que retrasar en varias ocasiones su anhelado enlace. A pesar de todo, María y Gonzalo han podido contraer por fin nupcias en una reducida ceremonia en la que, según publica 'Diez Minutos, la pareja se mostró completamente emocionada y acabó derramando alguna que otra lágrima con los discursos de algunos amigos íntimos.
Tras el 'sí, quiero', los recién casados y sus invitados se trasladaron al restaurante Contrastes, donde disfrutaron de un exquisito menú y tarta nupcial a cargo del chef, Diego Ferreira, quien será también el encargado del catering de su gran celebración el próximo mes de mayo.