"Pues nos vamos los dos", con esa frase terminó voluntariamente el concurso de Silvia Casado en la primera edición de 'Gran Hermano'. Fue lo que la malagueña dijo cuando la audiencia expulsó a Israel, con el que había mantenido una relación sentimental dentro de la casa. Estuvo 24 días en Guadalix de la Sierra, pero todavía sigue siendo "la de Gran Hermano": "yo llevo un montón de años con la peluquería y mucha gente aún dice: "Me ha peinado la de Gran Hermano", comentaba Silvia a 'Diario Sur' tras salir del reality.
La relación con Israel continuó y ambos tuvieron un hijo que nació cuando ya estaban separados. El buen rollo entre Silvia y el gallego tras poner fin a su relación ha continuado y buena muestra de ello son todas las imágenes que Israel comparte con su hijo. Además, Israel, que trabaja de celador en un Hospital, y Sandra (su nueva pareja) comparten muchos momentos con su hija y el hijo de éste y Silvia, llevando con normalidad un nuevo modelo de familia. Se ve que que el respeto y el amor son la máxima para ellos y a nosotros nos encanta.
En el caso de Silvia, la ex gran hermana ha retomado su carrera como peluquera y ahora es estilista de novias en Málaga. En sus redes sociales podemos ver todo el trabajo que realiza y como agradece el buen momento profesional que está viviendo a todos sus compañeros: "compartir tiempo con vosotros es aprender de peluquería, de vida, experiencias, viajes... no me canso de decirlo. Hace dos años que empecé este nuevo camino y nunca hubiera pensado todo lo que estamos haciendo".
También podemos ver a la malagueña (ella se mudó con toda su familia con cinco años a la ciudad andaluza, pero nació en Cataluña) disfrutar de sus "pollitos", que es como ella los llama, viajando por medio mundo. "De todo lo que os puedo dejar, me quedo con nuestros viajes. Espero que nunca dejéis de viajar conmigo. Os quiero infinito mis pollitos".
Bali, India, Londres... No hay país ni lugar que se le resista a la malagueña. Eso sí, Silvia siente predilección por Asia y son muchas las imágenes que podemos ver en sus redes sociales disfrutando de tradición y folclor. "A veces llegas a sitios que se conectan directamente con tus pensamientos y sentimientos. Tanah Lot marcó el principio de mi crecimiento espiritual. No tardaré en volver...", escribió junto a una imagen en Bali, pero no es la única que podemos ver en su 'time line'.
Poco, o en realidad todo, queda ya de aquella joven risueña que enseñaba su peluquería en Málaga en su vídeo presentación antes de entrar en 'GH'. Gracias al programa se enamoró y tiene un hijo de 14 años que, junto con su otro peque, son lo más importante para ella.
Además de seguir con su vida y evolucionar en su profesión (tras el impás que vivió debido al impacto social que tuvo aquel programa), Silvia sigue sonriéndole a la vida y abrazándola como ya demostraba con el brillo de sus ojos cuando entró en Guadalix de la Sierra hace ya 19 años. ¡Nos encanta verte así, Silvia!
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