"No todo es A, B y C, el amor tiene muchas variables": Lo que los colaboradores de ‘Vamos a ver’ aprendieron de ‘La Isla de las Tentaciones’
Marta López, Giovanna González Pérez y Alexia Rivas se sinceran sobre lo que han aprendido del amor viendo el reality más ardiente de la tele. Spoiler: no todo es drama y cuernos
Además, Marta López y Alejandra Prat cuentan a qué parejas les gustaría ver en 'La Isla de las Tentaciones'
Ahora que 'El Verano de las Tentaciones' calienta la pantalla con los momentazos más jugosos de todas las ediciones de 'La Isla', nos hemos puesto un poco relfexivos y le preguntamos a las colaboradoras de 'Vamos a Ver': ¿Se puede aprender algo del amor viendo el reality más caliente de la tele?
Porque sí, puede que el formato esté repleto de infidelidades, lágrimas, hogueras intensas y frases que ya son historia de la televisión, pero también deja entrever ciertas verdades sobre el amor, las relaciones y los errores que todos, famosos o anónimos, podríamos llegar a cometer.
Marta López lo tiene clarísimo: “He aprendido que no tengo que ir a 'La Isla de las Tentaciones'”, soltó entre risas. Pero no se ha quedado ahí. También comentó que le ha servido para replantearse ciertas situaciones hipotéticas: “Que no tengo que poner a mi chico donde haya tantas chicas guapas ni con tantos bikinis”.
Por su parte, Alexia Rivas sorprendió con una reflexión más emocional: “He aprendido que perdonaría cosas, o me gustaría que me perdonaran cosas con las que, a priori, era super tajante cuando era más joven”. Parece que las hogueras del programa han encendido alguna que otra idea en su forma de ver el amor. “Me di cuenta de que no todo es A, B, C; el amor tiene muchas variables”, dijo. Y aunque aclara que no es fan de las relaciones abiertas, sí admite que su mirada es más flexible que antes: “No quiere decir que yo quisiera una relación abierta, no, pero me lo tomaría con más calma”.
En esa misma línea, Giovanna González Pérez dejó caer una de las frases más lapidarias: “No sabía que se podían cometer tantos errores sin subsanar nada”. Una conclusión que podría ser aplicada a más de una pareja que ha pasado por el reality.
Lo cierto es que 'La Isla de las Tentaciones', entre tentadores musculosos, lágrimas a cámara lenta y reconciliaciones imposibles, nos ha mostrado una y otra vez que el amor puede ser tan hermoso como caótico. Y 'El verano de las tentaciones' está siendo el repaso perfecto para reír, indignarse y, por qué no, también sacar alguna que otra enseñanza.
