‘Sálvame’ tenía previsto que Olvido Hormigos acudiera al plató para abordar las polémicas sobre Toño Sanchís, de nuevo su representante. Sin embargo, la exconcejala no ha acudido y Kike Calleja, reportero del programa apuntaba que, en esta ocasión, Sanchís le “prohíbe” a Hormigos acudir.
Sin embargo, la exconcejala sí intervenía telefónicamente y respondía a Belén Esteban. “Dígale a la nenaza de su representante que venga aquí a hablar”, decía la colaboradora de ‘Sálvame’, desmentía que tuviera un topo e insistía en que la información que se ha filtrado de ella, como que se casa antes de final de año, es falsa.
“Yo defiendo a Toño porque quiero”, replicaba Olvido que añadía que ella valora “la amistad y la lealtad” cosa que Belén Esteban “no ha hecho”. Además, auguraba que la colaboradora demostrará “lo que es” y apuntaba que su actitud se debe a los celos: “Ahora he vuelto con Toño y es muy celosa”.
Belén Esteban pedía que hablaran de ella con documentación, pero Hormigos aseguraba que cuando la colaboradora habla del matrimonio de Sanchís no aporta papeles porque lo que le decía: “Que no exija a los demás”.
Además, la exconcejala se declaraba molesta por la forma en que la colaboradora se dirige a ella: “Tengo mi nombre y si no sabes si soy señora o señorita, para ti soy siempre señora”.
Por otro lado, Hormigos desmentía las informaciones sobre la segunda mudanza de Toño, que ha vuelto a cambiar de oficina. Según Hormigos, los motivos son meramente logísticos, ya que la ubicación no era la idónea para el representante. Además, hablaba de un nuevo proyecto profesional del representante que, finalmente, no salió adelante, y matizaba que Sanchís sólo iba a participar “como asesor”.