Conocimos a Paquita de Mónaco por su sobrino, Adans Peres, cuando mantuvo una relación con Estefanía de Mónaco, y se convirtió en colaboradora de televisión. Sin embargo, su situación ha cambiado drásticamente y es que, tras una mala racha, se ve obligada a vivir en la calle.
Ahora en invierno duerme en un albergue y hace las comidas en comedores sociales. Su familia no le ha prestado su ayuda y nos cuenta que todo empezó con la enfermedad y la muerte de su hija. Narra que, tras su fallecimiento, recibió una llamada en la que le comunicaron que su hija había dejado una deuda de 35.000 euros, le amenazaron, tuvo que pedir préstamos y finalmente fue desahuciada.