Víctor Sandoval ha vuelto a Sálvame dos días después de su tormentoso cara a cara con Nacho Polo como en un trance. Así lo ha dicho: “No tengo fuerzas, me siento torpe y no estoy nada centrado. Aquella noche no pude dormir y tengo que decir que desde entonces no me acuerdo muy bien de las cosas que hago. Es como si me hubieran metido en una coctelera y me hubieran agitado”.
El colaborador tiene miedo a entrar de nuevo en una depresión: "Estoy como un alma en pena, no puedo ni respirar. Todo esto me ha dejado muy tocado y no sé si estoy en una pre-depresión o una pos-tensión. Después del Deluxe creí que tenía que ir al hospital".
Terelu le ha recordado que antes del programa le dijo que tenía una oportunidad de hablar calmadamente con Nacho pero él ha dicho que le fue imposible: “No me pude calmar porque ni siquiera me miró cuando bajé por las escaleras”, ha dicho, y, contradictorio, a pesar de su enfado le hubiese gustado acercarse a su ex: “Me hubiese gustado darle un abrazo y que hubiésemos tenido una actitud más normal”.
Aunque le vimos emocionado y enamorado todavía del que fue su pareja durante 16 años, Víctor asegura que no quiere volver con él: "Yo no pienso en la reconciliación con él, sólo quiero reconciliarme conmigo mismo porque estoy en tratamiento psiquiátrico por un lastre emocional que tengo que se llama Nacho Polo".