Julián Contreras ha visto la luz al final del túnel y ha encontrado un trabajo en un Bingo en Móstoles. El hijo de Carmina Ordoñez vive un gran momento profesional: "Ha sido el momento de inventarse. Sabía que más tarde o temprano iba a llegar y las cosas serían como antes". Este nuevo trabajo ha hecho que también haya decidido irse a la ciudad madrileña para tardar menos en llegar.