Cuatro años después de que Mila se partiera de risa al ver como su íntimo amigo y compañeros de ‘Sálvame’ perdiera una muela en directo, la superviviente ha sufrido la misma sensación. Mientras que mantenía una conversación con sus compañeros se ha quedado con una de sus muelas en la mano y ha tenido la sensación de que eso significaba que iba a ser expulsada.