María Bravo es un ejemplo de superación. Su vida no siempre ha sido como en la actualidad, y ella misma recuerda que vivió una infancia muy humilde, eso sí, no necesitó nada porque si en su familia había algo que abundaba era el amor: “Yo no supe que era pobre hasta los 12 o 14 años por el amor que me daba mi madre”. Por eso, ahora, su misión es poder ayudar a otros, especialmente niños y mujeres, a través de su fundación ‘Global Gift’. Además, María siempre está rodeada de amigos como Eva Longoria o Victoria Beckham, entre otras, que le ayudan a cumplir su sueño de poder ayudar al mayor número de personas posible.