Valentina, periodista ucraniana, rompe a llorar con el mensaje de su hermano, médico en Kiev: "Estoy en peligro"

Las imágenes hablan por sí solas. No dejan de llegarnos vídeos desde Ucrania que muestran el horror que se está viviendo. Los ataques de las tropas rusas han llegado incluso a los hospitales. 'Ya son las ocho' ha hablado con un médico que actualmente vive esta situación de pánico.

Tenzig Morozov, neurocirujano, ha querido transmitir cómo se está viviendo todo en los hospitales: "Llevo diez años trabajando en Kiev como médico. Ahora estoy en Kiev, en el hospital en el que trabajo. Estoy en peligro. El Estado y la Nación de Ucrania están en peligro".

"Tengo familia y ahora mismo están conmigo. Hoy ha sonado una sirena de un ataque en Kiev. Nos hemos refugiado en habitaciones especiales, en búnkers", contaba.

Por último, ha aprovechado su grabación para mandar un mensaje solicitando apoyo: "Solo quiero decir que soy médico, que yo siempre cuido de la gente. Yo no quiero decir que Rusia hace la guerra, solo pido ayuda, ayuda a nuestro presidente, ayuda al gobierno, a la OTAN... Viva España. Viva Ucrania".

Las lágrimas de su hermana

Su hermana, Valentina, es periodista y se encontraba con nosotros en plató. Mientras escuchaba a su hermano, no ha podido evitar las lágrimas. Sónsoles le daba paso nada más finalizar el vídeo: "Lo siento... Mi madre, mi hermano y mi tía son mi familia ucraniana y están ahora ahí. Mi madre tenía que venir en un mes aquí a España, pero ya es imposible. Es muy duro", decía.

Además, ha contado cómo sus familiares decidieron permanecer en Ucrania: "Yo les estaba diciendo hace un par de días que vinieran para acá, no quisieron. Decían que estaban en su casa, que iban a proteger lo suyo. Mi hermano, que es doctor, dijo que se quedaba para ayudar al país en todo lo que pudiera, que su profesión es salvar vidas".

Sonsoles preguntaba a Valentina por las posibilidades de que su hermano sea alistado en el ejército: "Hace 30 minutos le han llamado porque es doctor obligado, para decirle que ya hay pacientes a los que ayudar. Gracias a Dios tenemos internet y podemos hablar", concluía.