‘Ya es mediodía’ vive un terremoto en directo: “Están temblando los cristales, la piel de gallina”

  • Sonsoles Ónega no puede creer lo que está sucediendo: “¿Me lo estás diciendo en serio?”

  • Paco Ballesta, con el miedo en el cuerpo: “Me tiemblan las piernas”

  • El reportero de 'Ya es mediodía' vive en directo un terremoto de 3.0 grados en la escala Richter

“Un terremoto ahora mismo, un terremoto ahora mismo, está temblando la casa”, es lo primero que ha escuchado Sonsoles Ónega cuando ha conectado en directo con Paco Ballesta que se encontraba en Granada para informar sobre la última hora de los terremotos que azotan la región. El reportero estaba viviendo en primera persona un nuevo terremoto de 3.0 grados en la escala Richter.

Sonsoles Ónega ha conectado en directo con el reportero de ‘Ya es mediodía’, Paco Ballesta, para conocer la última hora de los movimientos sísmicos que azotan la zona de Granada y conocer la realidad de sus ciudadanos que ven como sus casas se han llenado de grietas y tienen riesgo de derrumbe. Sin embargo, una vez más el directo nos ha vuelto a dejar sin palabras y hemos vivido en directo una nueva sacudida.

Al escuchar al reportero gritar eso de “Un terremoto ahora mismo, un terremoto ahora mismo, está temblando la casa”, Sonsoles Ónega se ha quedado muy sorprendida y ha dudado de que la situación fuera real “¿Me lo estás diciendo en serio?”. Sin embargo, la cara de Paco Ballesta hablaba por sí sola y eso que llevaba puesta la mascarilla: “Me tiemblan las piernas por el subidón de adrenalina”.

Con los bellos de gallina y un gran susto en el cuerpo, el reportero ha sentido en su propia piel lo que sienten los vecinos de Granada que siguen viendo como continúa el enjambre sísmico con una veintena de temblores de 2,5 grados. Tan solo unos minutos después, el terremoto del que hemos sido testigos en directo ha sido registrado y se trataba ni más ni menos que de un terremoto de 3.0 grados en la escala Richter. Un temblor considerable que ha vuelto a poner a los vecinos en vilo.

Tras sentir lo que sienten los granadinos cada noche, Paco Ballesta ha hablado con una de las vecinas de la zona, quién nos ha contado el pavor y la indefensión que sienten ante una situación que no deja de repetirse.