Anoche se estrenó la 'Isla de las Tentaciones' reality que, en teoría, pondrá a prueba la filedidad de cinco parejas, conviviendo por separado en lujosas casas con especímenes tentadores del sexo opuesto. Pero esto, llevado a la práctica, conlleva un estudio sociológico que va mucho más allá de los participantes de este reality.
De igual manera que los romanos observaban expectantes cómo los cristianos eran echados a los leones, nosotros desde casa, totalmente enganchados por una trama que no ha hecho más que comenzar, deseamos con auténtica ansia viva que el verdadero salseo comience y que la 'Isla de las Tentaciones' no tarde en convertirse en una extraña mezcla entre la Plaza de Toros de 'Las Ventas' y 'Sodoma y Gomorra'.
Lejos de esperar que triunfe el amor por encima de todas las cosas, deseamos con todas nuestras fuerzas que caigan en la tentación, que se traicionen y que nosotros seamos testigos en primera fila.
Hemos pasado de echarnos las manos a la cabeza porque Adara se tiraba tres horas mirándose a los ojos con Gianmarco a anhelar que parejas sentimentales de varios años se pongan los cuernos y rompan su relación.
Es más. Estos deseos se incrementan de manera desorbitada cuando se focalizan en una sola persona. En el ya conocido desde anoche 'el Pokemon' del reality.
Gonzalo Montoya, ex-concursante de 'Gran Hermano 14' puso en práctica el perfecto manual de cómo ganarse la animadversión del público en tiempo récord. De eso no cabe ninguna duda.
Su entrada fue apoteósica definiendo a su entonces novia como 'Pokemon' y 'paquete'. Y, por si esto no fuera suficiente, su pareja se trataba de Susana Molina, una chica guapa, lista y educada que el público eligió como la ganadora de 'GH 14'.
El Ying y el Yang del apoyo mediático porque recordemos que Gonzalo tuvo que ser sancionado disciplinariamente por la organización del programa en el que participó junto a su chica.
A pesar de esto, Susana y Gonzalo iniciaron un noviazgo que gracias a este reality conoceremos con todo lujo de detalles.
Ayer Gonzalo optaba por poner la tirita antes de tener la herida anunciando en las redes sociales que iba a ignorar cualquier crítica. Pero, pocas horas después, durante la emisión del reality comenzó a reaccionar a los comentarios recibidos:
"Ni los malos somos tan malos, ni los buenos son tan buenos. Quien avisa no es traidor (…) ¿Cómo estáis? Me han dejado de llegar insultos y ya me molesta que no perdáis vuestro tiempo conmigo".
Mientras, Susana recibía un aluvión de mensajes de apoyo: "Millones de gracias! No me esperaba tantísimo apoyo. Estoy más tierna que un pan de leche, os como!".
Y es que, aunque todo apunta a que será Gonzalo quien caiga en las redes de Katerina, en este caso, lo que la mayoría del público aplaudiría es que Susana se atreva a poner los cuernos a Gonzalo y dé la patada al sevillano.
Vamos que, en definitiva, únicamente hemos necesitado una sola entrega del nuevo relity para sacar lo peor de nosotros pero ¿y lo que vamos a disfrutar mientras tanto?
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