(Tradicional) Carta a los Reyes (Magos)

telecinco.es 25/11/2009 08:11

Me resulta imposible prever lo que ha de suceder de aquí a un mes en la casa de Guadalix (de la Sierra, que nunca lo pongo), pero algo sucederá seguro en semejante fecha. Será ese día tan especial en que recibimos regalos provenientes de un lugar ignoto por inexistente. Sé que algunos mantienen la tradición particular de los Reyes Magos, de hecho, así lo digo en el título de este escrito. Pero yo soy más de Papá Noel (Santa Claus, Viejito Pascuero, Colacho o San Nicolás).

Me apoyaré hoy, por tanto, en ese viejo de barba blanca cuya imagen inventó la Coca-cola (hace un par de meses me he cambiado a la Pepsi, tras años de adicción al fluido competidor). Como es tradición en este gato poco amigo de las celebraciones navideñas, escribiré hoy la carta con mis particulares regalos, como siempre con los mejores deseos, para todos los concursantes. Bueno, unos mejores que otros, también es cierto. Lo hago con suficiente antelación, facilitando que un tipo tan genial como para trabajar solo un día al año pueda preparar los regalos, aunque algunos requerirán algo más de paciencia por parte de sus destinatarios.

Pero antes de ir al tema haré un brevísimo repaso de lo que está pasando en la casa. Ayer quien viese las imágenes del directo durante mucho rato pudo haber pensado que Indhira ha abandonado la casa de Guadalix. Ya adelanto que no es así. La malagueña pasó casi todo el día encerrada en el dormitorio, desoyendo las recomendaciones que le hacían sus compañeros, especialmente un Toscano que se ha convertido últimamente en su principal paño de lágrimas, el único que parece comprenderla. Este gato también la comprende, a pesar de lo que vengo diciendo estos días sobre su actitud ligeramente paranoica y las excesivas ínfulas que se da muchas veces.

No me resulta complicado entender el sufrimiento de alguien que ve durante la tarde del domingo como Carol, ayudada por Carolina, pone baldes de agua caliente al jacuzzi una vez Arturo había avisado de que se daría un baño. De acuerdo que podría haber planeado bañarse con él, o incluso aceptar la invitación hecha por la drag queen de Alcobendas. Pero a qué negarlo, yo nunca habría aceptado tan envenenado y maledicente ofrecimiento, innecesario por otro lado. No me extraña que se le revuelva hasta el alma viendo a quien fue casi su único apoyo en la semana horribilis ahora cómplice de Carol en su continua incitación. No me andaré con chiquitas si digo que en mi opinión Carol se enfrenta a un desafío para el que no está preparada, y Carolina pretende el desgaste del contrario enmascarando su cobarde actitud entre frases hechas, clichés posiblemente de su invención, tan vacuos como aburridos resultan a este gato espectador.

Carol no está preparada para la tarea que se ha propuesto ella misma llevar a cabo. El resultado puede parecer hasta patético y humillante. ¿De qué otra forma se puede interpretar que la persona a quien Indhira dedicó el calificativo de insípida y el exabrupto de llamarla zorra, ahora sea incapaz de enfrentarse a ella? La cántabra de Donosti espera paciente que su oponente vaya a ella y pierda los papeles, lo cual da cuenta de su malicia. Pero valentía ninguna, porque se ha dejado insultar sin responder a la cara de Indhira. Se limitó a escandalizarse en plató, para luego llevarse una semana planeando una sonora reacción que no ha llegado ni llegará.

Bien mirado, pienso que Carol ha engañado a la audiencia. Por eso también entiendo que ahora Indhira le vuelva a llamar insípida y zorra. Sigo coincidiendo por completo en lo primero y rechazando de plano lo segundo, pero dado que la interesada parece dejarse ¿por qué no repetir el mensaje? Lo volverá a ver en plató y otra vez jurará venganza en una falsa reacción sin fin. Y Arturo vuelve ahora a decirle que no le conviene y esas cosas. Ya nos lo sabemos: soy medio borracho, tengo tres hijos y me pierden las mujeres. Pero hace justo una semana se estaba acostando con ella, o sea, que estaban 'jincando'. Con ese panorama como para no estar medio desquiciado, y luego la llaman paranoica, y Glenn Close en 'Atracción Fatal'.

Por su parte, Siscu decía esta madrugada que sus intocables en las nominaciones son Arturo, Indhira, Pilarita y Tatiana. A lo que añadía: "están por ahí Ángel y tu hija, que no la voy a nominar". Mucho me equivoco o le dijo prácticamente sus nominados. A descartar solamente uno de estos nombres: Toscano, Laura, Carol y Carolina. Esto siempre y cuando salga Gerardo. Ignoro por qué en esta ocasión no ha dicho todavía que España demostrará estar enferma si le echan a él.

Y vamos ya con lo prometido. Aviso de que el orden no indica prelación, siendo tan solo producto de un capricho felino:

Pilarita: Una sordina para su estridente voz. El elixir que libra a quien lo toma de la (pretendidamente) eterna juventud. Un zurrón lleno de extensiones, a condición de ser usadas solo en momentos que la ocasión requiera.

Siscu: Otra tirada completa de la revista 'Nuevo Vale', para que disfrute viendo ese cuerpo que ha parido madre. Un ejemplar de la novela de Carmen Laforet titulada 'Nada', porque eso es lo que él ha supuesto para el programa, y así sería una y otra vez resultara repescado. Un disco de efectos especiales de sonido, para que cuando quiera simular dar unos besos a alguien en el ángulo muerto del cuarto de baño suene por lo menos creíble.

Saray: Un pasaporte donde ponga que no es la ferrolana hija, sino simplemente Saray (como aquella vieja radionovela llamada 'Simplemente María'). Unas vacaciones en la clínica Buchinger (el nombre no es coña, aunque cueste creerlo), para bajar de peso y ponerse tan cañón como en las fotos que exhibió su madre en Sálvame. Otro concurso en el que gane el premio, ese que se merece y no podrá conseguir en este Gran Hermano.

Ángel: Una túnica azafrán. La operación del tercer ojo (sin bromas) en un templo tibetano de Lhasa. La participación en un concurso tipo Operación Triunfo donde solo hubiera un concursante y fuera él, dado lo inagotable de su repertorio. Un disco de relajación Zen y Tranquimazin con receta médica para cuando piensa que se le escapa el maletín, ese del que tanto le molesta escuchar hablar. Un fin de semana primaveral en Málaga para que vea lo bonitas que son las biznagas y entienda mejor a Indhira.

Gerardo: Una grabadora para que deje registrados sus discursos tantas veces repetidos y deje de darle la chapa a quienes le rodean. Una licencia de televisión en las islas Seychelles para que haga triunfar allí su Prager TV, al tratarse de un sitio ideal porque está lejos y además el gobierno solo autoriza las emisiones televisivas solamente durante dos horas al día, lo cual ya es bastante teniendo en cuenta su indolencia.

Laura: Unas vacaciones con Ángela en una isla tropical, cualquiera menos Seychelles, no vaya a encontrarse con Gerardo. Un pantalón tejano (a ser posible ajustado), para poder cambiar el que lleva puesto desde hace días. Una sesión fotográfica donde sepan sacar provecho de su bonito rostro.

Arturo: Una colección de películas en DVD, incluyendo títulos históricos en la historia del cine como los siguientes: Penetreitor, Nabocop, Raboman, El Polvo Jurásico, Pene de Muerte, Los Pichapiedra, Eduardo Manospajeras y El Club de la Ducha (cualquier parecido con el original es pura coincidencia). Un maletín lleno de 'humilditina', moderno invento de la industria farmacéutica prescrito para casos graves de prepotencia y falta de humildad, aún en fase de desarrollo e investigación. Varias cajas de bromuro. Un papel secundario en una serie, para dejar de ser protagonista sin proponérselo y, por tanto, odiado por ello.

Toscano: Una vida de lujo, póquer y sexo en Las Vegas, para no ocuparse de otra cosa que no sea disfrutar. La suerte en el juego de las cartas que le niegan ahora quienes no saben distinguir entre la vida real y un juego. Unos cuantos buenos amigos con quienes demuestre saber lo que es la lealtad.

Tatiana: Un plan de reinserción social donde le enseñen a controlar sus impulsos violentos, cuando menos verbales. Una entrada para ir a ver a Faemino y Cansado, quizá así ría de verdad en lugar de su habitual histrionismo. Una vida con el cariño que posiblemente le ha faltado hasta ahora.

Indhira: Una caja de 'Kleenex' para que no se ahogue en su mar de lágrimas. Un maletín de primeros auxilios por si no gana ese otro ansiado maletín. La paciencia necesaria para aguantar hasta una final que merece como nadie. Un ramillete de jazmines que además de ahuyentar a los mosquitos le ayude a huir de algunos moscones. La lucidez necesaria para saber cuando debe decir basta.

Carolina: Un libro con sus frases más trilladas, para que no queden en el olvido cuando ella se canse de decirlas y la audiencia (sea cual sea) de escucharlas. El libro de autoayuda 'Decir las cosas a la cara', para que deje de apuñalar a todo el mundo a sus espaldas. La visita guiada a un Instituto de Oncología para que aprenda a tratar con respeto esa enfermedad. Un trabajo en los medios, porque lo está pidiendo a gritos y lo merece.

Carol: Una chaqueta que tenga para taparle el sobaco (esto se lo ha dicho Nagore a Kiko Hernández y aún me estoy riendo). Unas cuantas parejas que romper (esto le gusta), algún que otro famoso más en su cama y también alguna buena acción para cuando se dé cuenta de lo efímera que es la fama.

Y los que ya no están también merecen su regalo:

Gonzalo: Una caja de tila. Lo que pida, antes de que su bestia interior salga disfrazada de reno y secuestre a un paje real para pedir su regalo como rescate.

Juan: Una báscula de gran precisión. Un ábaco para que aprenda a hacer bien las cuentas.

Rebeca: Una vida adulta y real, sin muñecas de treinta años ni falsos montajes amorosos. Una regadera... o sea, otra.

Melanie: Un poco de 'espabilina', por razones evidentes. Un saco de la risa porque está mucho más guapa riendo que seria.

Nagore: Una oportunidad (otra), como piden los malos toreros. O un intercambio con Carol, por lo que más quieran. Una portada en 'interviu' (otra en 'FHM', y ¿por qué no? en 'DT', 'Man' y lo que se le ponga a tiro) de una vez, que ya está tardando. Y más colaboraciones televisivas porque se las ha ganado.

Hans: Una bata de analista, porque eso es lo que mejor hace. Un bono para seguir desayunando con su madre en el Retiro durante toda una vida. La misma decisión y agallas necesarias para seguir llevando su vida por donde desee. Un puesto de colaborador en Gran Hermano, porque él sí sabrá de qué está hablando.

Ángela: El ya mentado viaje con Laura, donde le quite a su esposa el calentón que no ha podido (querido) quitarle Saray. Un curso de simulación, para que en otra ocasión sepa ocultar mejor sus secretos.

Lis: ¿Quién es Lis?

Que el viejo zorro de la casaca roja se porte bien con ellos, y aún mejor con todos nosotros.

[Debo pedir disculpas por los fallos del servidor que acabaron con nuestra paciencia durante casi todo el día de ayer. Espero que hoy vayan mejor las cosas. Mañana jueves tengo una nueva cita para responder vuestras preguntas. A las 19.15 horas nuevo encuentro digital. Ya puedes dejar tus preguntas. Os espero. Recuerdo también que puedes seguir participando en el Test de Gran Hermano, donde tienes oportunidad de probar tu nivel de conocimientos sobre la historia del programa]