Comienzo aquí una serie corta que consiste en hacer el mismo test a varios concursantes de ediciones pasadas de Gran Hermano. No esperen nada muy trascendental, es el típico cuestionario con preguntas cotidianas sobre gustos y sensaciones, cuyo objeto es conocer un poco más a algunos de aquellos que tuvieron la generosidad de dejar su vida al descubierto durante unos meses.
Empiezo con Indhira Kalvani e Iván Madrazo, con quienes disfruté en sus respectivas ediciones y a quienes aprecio sinceramente hoy. Son dos románticos (solo hace falta ver sus películas y canciones preferidas), que duermen igual (los dos en posición fetal) y se eligen mutuamente cuando se les pregunta por un concursante que no sea de su misma edición. Excuso decir las respuestas que me han ayudado a conocerles un poco mejor, posiblemente distintas a las que han dejado semejante sensación en cada uno de nuestros lectores.
En todo caso, agradezco a ambos su disposición a dedicarnos parte de su tiempo. Dentro de unos días tendremos a otros protagonistas ante esta misma prueba. Que este juego tan pueril como entretenido dure más o menos está en relación al esperado comienzo de nuestro vicio privado y, a menudo, inconfesable. Gran Hermano 12+1 se resiste a ver la luz, y cuando parece que ya está al caer nos da esquinazo dejándonos cierta sensación de amantes burlados. Esta vez lo celebraremos más que nunca cuando la fecha sea inamovible. Tal vez entonces podamos hablar de ello.
Por tanto, no me pregunten por ese pequeño detalle ni tampoco intenten confirmar si es cierto que su vecino va a entrar en la casa de Guadalix. Bien es cierto que lo pueden hacer, pero no tengan mayores esperanzas de obtener respuesta. Lo primero creo que ha quedado claro o, más bien, lo suficientemente oscuro. Sobre lo segundo, aseguro que ni saber quiero. Eso sí, echo de menos esas divertidas conjeturas que casi nunca aciertan. Igual me planteo improvisar mi propia versión, pura parodia de esas listas que suelen circular en las que acostumbra a haber un supuesto nazi, alguien que tuvo relación con la droga y, casi siempre, una brasileña.
Por no hablar de gemelos, embarazadas y militares sin graduación. El año pasado acertaron solo a medias con el sordomudo. El adorable Edu solo tenía una dificultad de audición, pero hay quien debió amenazar con llevarse su Scattergories si no le aceptaban lo del sordomudo. Estoy seguro de ello. Cuanto más aciertan esas quinielas más lo lamento. El año de Iván hablaban de una china, una señora de edad avanzada y... una brasileña. ¡Cómo no! Les costó convencer a más de uno de que Liz (Lizfanny Emiliano, tú sabes) era oriunda de la República Dominicana. Hubiera preferido no tener tantos datos de antemano.
En todo caso, habrá más conjeturas en la medida que tarde más en empezar este ansiado 12+1. Y también habrá más test. Vayamos con el prometido: Iván e Indhira (por orden de edición) responden a nuestras treinta preguntas.
Un color.
Iván: Blanco.
Indhira: En las fechas que estamos... dorado.
Un olor.
Iván: La madera ardiendo en la chimenea.
Indhira: Depende del momento. El último, esta tarde con mi familia y la casa impregnada de olor a café con churros... ¡Mmmmmmmm!
Un rincón de tu casa.
Iván: El sofá
Indhira: El salón, hago mi vida allí.
Una ciudad del mundo.
Iván: Venecia.
Indhira: París, recuerdo ese viaje con mucho cariño y me encantó la ciudad, el cielo de París es especial.
Un regalo útil (para ti).
Iván: Una camisa de D&G.
Indhira: Soy muy presumida, así que cualquier cosa que me pueda poner. O colonia, maquillaje, complementos... es fácil acertar conmigo.
Un plato de comida.
Iván: Pasta.
Indhira: Patatas fritas mojaditas en huevo frito.
Una afición.
Iván: El cine y la música.
Indhira: Leerte, Gato. Jajaja. ¡Y escribir en el de al lado de vez en cuando! Bueno y soy muy normalita, veo la tele, leo... el cine, salir. Ahora estoy aprendiendo a hacer punto, estoy dando clases de danza del vientre y voy a spinning cuando me acuerdo. Vamos que le meto mano a todo lo que me propongo... esto ha sonado raro, ¿no?
Signo del zodiaco.
Iván: Virgo.
Indhira: Libra.
Una película.
Iván: 'El diario de Noah'.
Indhira: 'Ghost'.
Una canción.
Iván: 'Perdóname', de Pablo Alborán.
Indhira: Mi favorito es Marc Anthony, pero se me ocurre ahora una que me cantaba mi madre: 'Baila Morena', de Julio Iglesias. Es muy yo.
Tu(s) programa(s) de televisión favorito(s).
Iván: Gran Hermano.
Indhira: Me gustan todos los realities, me engancho a cualquiera.
Tus principales cualidades.
Iván: Inteligencia y lealtad.
Indhira: ¡Eso queda mal que lo diga yo!
Tus principales defectos.
Iván: Soy tozudo y desordenado.
Indhira: Impaciente, desconfiada, impulsiva y sensible.
¿Practicas algún deporte?
Iván: Hípica.
Indhira: Claro, cuando tengo cargo de conciencia de lo que he comido me monto en la bici.
¿Tienes alguna mascota?
Iván: Una gata persa: Nesi
Indhira: Tenía un perrito, Baloo, pero murió hace poco. Era muy mayor.
Si hubieras nacido animal ¿cuál serías?
Iván: Un caballo.
Indhira: Ojalá hubiese nacido siendo una mantis religiosa. Esas sí que se lo montan bien.
Alguna persona que admires.
Iván: Juan Pablo II.
Indhira: Mercedes (Milá) me encanta porque tiene muchísima personalidad, es culta y valiente. Y que me toque más de cerca mi madre.
¿Cómo duermes?
Iván: En posición fetal.
Indhira: En posición fetal, mirando para la ventana. Almohadita blandita.
¿Cuándo fue la última vez que lloraste y por qué?
Iván: Hace poco, viendo una película.
Indhira: Ayer. Hombres... ¡no tengo remedio!
La última mentira que has contado.
Iván: Una excusa al llegar tarde.
Indhira: Que me gustaría ser una mantis religiosa.
Tu mayor sueño aún no cumplido.
Iván: Dar la vuelta al mundo.
Indhira: Me queda todo por hacer: viajar, idiomas, trabajos, estudios, familia... me queda mucho que construir aún.
Cuenta la situación más embarazosa de tu vida.
Iván: Me caí en la pasarela durante un desfile.
Indhira: Mis primeros bolos. Discotecas llenas de gente mirándome y yo encima de un escenario haciéndome fotos... no es tan bonito como parece, me moría de la vergüenza.
La edición de Gran Hermano que más te ha enganchado como espectador.
Iván: GH 11, porque es la primera que vi como espectador.
Indhira: GH 1 y GH 10.
Tu concursante favorito de Gran Hermano (no vale un compañero de edición).
Iván: Indhira, es a quien defendía.
Indhira: Iván Madrazo, era fan y ahora soy amiga.
El mejor y el peor recuerdo de tu paso por la casa de Guadalix de la Sierra.
Iván: Mis mejores recuerdos son las navidades que pasé en la casa. Y el peor, cuando perdí una prueba y mis compañeros me lo echaron en cara.
Indhira: Los mejores cuando salía de la sala de expulsión (fueron 7 veces las que me libré de la expulsión). Y el peor, la semana que me fui.
De entre tus compañeros de edición, dime quién representa la cara y quién la cruz.
Iván: Almudena fue sincera, buena compañera y leal. Carlos H. y Carlitos eran todo lo contrario: traidores, oportunistas y rastreros.
Indhira: Yo soy la cara y Ángel el que quedó... digo... la cruz. Con esto quiero decir que yo fui tal cual, con mis defectos y virtudes a la vista de todos; y Ángel ganó mi edición pasando desapercibido y sin sacar su personalidad.
¿Gran Hermano ha cambiado tu vida?
Iván: Sí. Al cien por cien, en todos los sentidos.
Indhira: Sí. La fama me beneficia a nivel económico, pero me perjudica en mi vida personal. Ayer, por ejemplo, fui a comprarme un sujetador y estaban haciéndome fotos en la tienda mientras buscaba en los percheros. Agradezco que la gente me aprecie, pero hay situaciones que son incómodas.
¿Qué cambiarías del programa?
Iván: No cambiaría nada.
Indhira: La repesca. Pilarita salió la primera en mi edición y, sin embargo, quedó finalista. Es una incongruencia como un piano.
¿Cuál ha sido su principal enseñanza?
Iván: Con muy poco se puede ser feliz.
Indhira: ¿Lo que he aprendido? Que compartir piso debe ser siempre la última opción. Y también, supongo, que ahora soy más desconfiada que antes.
¿Volverías a entrar?
Iván: Mil veces.
Indhira: Sí, pero sinceramente lo haría planteándomelo como un trabajo, como una manera de ganar dinero, y no como experiencia. Encerrarse en una casa en la que, además, no controlas nada, ni siquiera algo tan básico como encender o apagar la luz, es algo muy agobiante.
Gracias, de nuevo, a los dos. ¡Y feliz año nuevo a todos!