Ylenia y Belén crecidas tras la expulsión de Ares

telecinco.es 27/02/2015 10:05

Belén se salvó in extremis. En caso de haber sido la expulsada de anoche, tal como todo indicaba que pasaría, se habría ido en uno de los mejores momentos de su popularidad desde que comenzara GH VIP. Tras provocar el lamentable trato que todos (menos Coman) dieron a Olvido las dos primeras semanas, Belén ha tenido oportunidad de mejorar su imagen, aunque la ha desaprovechado en repetidas ocasiones. Solo tras la salida de Sandoval parecía remontar. Empezamos a ver entonces una Belén menos malhumorada y más humana.

Contradiciendo la creencia expresada en varias ocasiones por Ares, no era Fede quien contaminaba a Belén, sino más bien Sandoval. Entre los dos se retroalimentaban, fomentando un enfrentamiento artificial con varios compañeros. La compañía de Sandoval y esa pléyade de palmeros de la que también formó parte Ares perjudicó gravemente a Belén, mucho más relajada en esta última semana. La expulsión de Ares puede poner en peligro esa recuperación, al menos mientras siga en la casa Ylenia, junto a quien puede tener la tentación de repetir viejos errores. Ya anoche se comportaban como dos matonas de barrio, faltando a los familiares de Ares, a quienes acusaban de los abucheos del plató. Como si los concursantes pudieran llevar doscientas personas a la gala.

Menospreciando al público, Belén e Ylenia solo pueden conseguir que su victoria de anoche se vuelva contra ellas y terminen lamentando no haber salido antes, conservando todavía las simpatías de buena parte de la audiencia. La Belén cariñosa que daba la mano a Ares en el momento de conocer el veredicto popular y dejaba la puerta abierta a una buena relación con su oponente fuera de la casa, dejó paso a la Belén prepotente y desafiante que ya hemos conocido. Entremedias solo una expulsión superada, la primera en su caso, y la reacción airada del público en plató, contradictoria con el veredicto de los votos.

En la casa llegaron a escuchar la palabra tongo entre los abucheos del público en plató. Aunque no significa lo que pretenden expresar quienes utilizan ese término, la intención era poner en duda el vuelco en los porcentajes (sorpasso, lo llamó Jordi González, que sacó adelante una complicada gala en un precario estado de salud, lo cual da muestras de su profesionalidad). La noche empezó con una ventaja de más de 8 puntos entre las dos nominadas más votadas, lo cual ponía virtualmente en la calle a Belén. Una vez salvada Ylenia, los votos se repartían entre Belén y Ares, con la distancia reducida a algo más de 7 puntos. Unos diez minutos antes de cerrar los teléfonos esa distancia se había reducido a menos de 3 puntos. Y se produjo el vuelco: 49,1 % frente a 50,9 % segundos antes del final de la cuenta atrás, y el resultado final del 51,1 % frente al 48,9 %. Belén se había salvado por la mínima. Kiko Matamoros, defensor de Ángela, lo comparaba a la final de Champions perdida por el Atlético de Madrid en el minuto 93.

Las acusaciones de "tongo" resonaron en varias ocasiones, particularmente tras haber entrado en plató Ares Teixidó. Esto sucedía a pesar de que el programa procuraba evitar comentarios maliciosos poniendo una cuenta atrás de 40 minutos nada más comenzar el programa. No es exclusiva de nuestro Gran Hermano que se hable de la posibilidad de jugar con la hora en que se cierran los teléfonos para decidir la expulsión haciendo coincidir el cierre con el momento deseado. Evidentemente, esto solo es posible cuando dos porcentajes están muy igualados. Recuerdo a Jorge Rial, presentador de varias ediciones de Gran Hermano en Argentina, comentando esto mismo en su programa ‘Intrusos’, que lleva más de diez años siendo líder en ese país.

Pues bien, no bastó con fijar la hora de cierre de los teléfonos para evitar las sospechas. Tampoco que Jordi volviera a dejar claro que las votaciones están auditadas por un notario, lo cual lleva pasando desde la primera edición y también desde entonces se ha venido informando sobre ello, sin que algunos terminen de creerlo. Solo recomiendo a los indignados que la próxima vez voten, es así de sencillo.

No gastaré ni un minuto más en este tema, que anoche terminó teniendo eco incluso entre los concursantes. Lo que escucharon del público en plató tuvo bastante que ver con la virulenta reacción de Belén e Ylenia. Si no rectifican su actitud, les puede pasar factura tanto la ira que mostraron contra el público como el estar tan crecidas al haber ganado esta batalla a Ares.

En el momento de conocer la decisión de la audiencia volvimos a comprobar que Ares no se ha comportado en muchas ocasiones como la antagonista de Belén sino como aspirante a formar parte de su grupo de palmeros, solo que en su caso terminó siendo expulsada de esa élite. Caso insólito que el expulsado consuele a la ganadora del duelo. Ares dando ánimos a una casi desfallecida Belén, que no parecía evidenciar ningún deseo de marcharse de la casa.

No pongo en duda que le gustaría reencontrarse con los suyos y vivir sin las carencias y el aislamiento a que obliga este programa. Pero si esta semana repitió que quería irse fue exclusivamente para tener una justificación en el caso de haber sido expulsada. Belén quiere irse, pero sin abandonar ni ser expulsada por la audiencia. Creo que ni la física ni la razón permiten tal cosa. En el fondo ella es una idealista, hija de aquel Mayo Francés donde se leían inscripciones como la de: “Sed realistas, pedid lo imposible”.

La pieza clave, dovela central de la entrevista de Jordi González a Ares, fue esta pregunta: “¿Por qué quieres gustar a Belén?”. La expulsada negó la mayor: “No quiero gustarle”, y Jordi remataba como buen constructor de arcos: “Sí que quieres. Quieres quererla, gustarle y que te proteja”. Si Belén dijo “meté mierdé”, yo digo ahora touché. Pero Ares es dura de roer y cada vez que pareció estar tocada y hundida renació de sus cenizas, cual ave Fénix, para seguir dando guerra. Así fue incluso después de un enfrentamiento con Olvido donde la exconcejala ganó por aclamación, arrasando por completo a Ares.

Ares me confirmó anoche que tras su apariencia firme y desenvuelta hay una persona insegura, que necesita la aprobación de los otros más de lo que parece deseable. A pesar de esto, se supo fajar bien con el exagerado Sandoval, incluso con un incisivo Matamoros que le habló de siervos lamiendo el trasero de Belén. Sin embargo, no pudo con Olvido, a quien imagino deseosa de que llegase el momento de su venganza.

Como en las películas de Liam Nesson, la venganza de Olvido llegará en varias entregas. La siguiente pinta como definitiva, puesto que será contra Belén. Dudo mucho que entonces lo tenga tan fácil como anoche. Ares comenzó pidiendo perdón a Olvido, lo cual cabía esperar tras verla avergonzada viendo las imágenes de la noche de su cumpleaños, con el dedito moviéndose a la altura de su pubis y haciendo fotos con Aguasantas mientras sus dedos dibujaban una peineta, peseta o como queramos decirlo. Olvido no aceptó su perdón. “No me lo creo. Lo que hiciste fue acoso puro y duro. Fuiste consciente de estar siendo cruel”, le dijo Olvido, en un chorreo prácticamente incontestable.

No le falta razón a Olvido al no creer el perdón. Sin ir más lejos, la noche anterior tuvo Ares una ocasión incomparable para allanar el camino hablando con Coman. Molesto este porque en la casa se volviera a hablar de ella (mal, por supuesto), era escuchado por Ares, quien emocionada le decía: “Olvido estará muy orgullosa escuchando las cosas que dices de ella”. Sin embargo, evitaba cualquier signo de arrepentimiento sobre lo sucedido con esa concursante, más bien todo lo contrario. Creo que no llegó a entender a Coman, ni empatizó con él en relación a este asunto.

Pero el momento cumbre de Ares anoche fue su despedida de quienes han sido sus compañeros y siguen estando ahí dentro. Creo que no se entendió el tono humorístico con el que le dijo a Belén que los atronadores abucheos eran todos de su gente. “Está todo el plató incendiado conmigo, enfadados porque estoy aquí”, decía Ares. De verdad que en este caso no la vi pasando la húmeda a distancia por el orto a Belén sino más bien irónica. Lo bueno fue la respuesta de Belén: "Gracias, España, por salvarme. Os quiero. Hala, venga, besitos… no te jode". Después de la gala, Belén en pleno subidón, decía: "Me parece una falta de educación y de respeto lo de los abucheos".

A Ylenia le decía Ares: “Tú sabes que me has hecho daño, pero también sé que a veces te lo haces más a ti misma”. Esto está en la categoría de ‘zas en toda la boca’. Aunque no fue más pequeño el hachazo a Fede: “Te espero aquí fuera, espero que sea pronto”. Escueta y afilada despedida. La cara de Fede fue un poema, y tardó en reaccionar hasta que se le ocurrió eso de que le había confirmado lo que pensaba de ella. Añado yo: y no se atrevió a decirle nunca. Y el momento astuto de la noche llegó cuando Ares proporcionaba una información de vital importancia para Coman, utilizando una clave pactada entre los dos.

Ares decía lo siguiente a Coman: “Escúchame con atención. ¿Te acuerdas de lo que hemos dicho hoy? Nueve menos. Sigue confiando en el pueblo. Aguanta, gracias por todo. Está todo tal y como lo planeabas. Ha habido ahí un resquicio, pero está todo saliendo muy bien. La operación Mowgli va perfecta. Te quiero”. En cuatro frases le informó de que su porcentaje había estado muy igualado con el de Belén, siendo bajo el de Ylenia. Coman sabrá aprovechar esta información, puesto que sigue siendo el más observador y quien mejor está leyendo el concurso.

De fondo se escuchaba a Sandoval y otros protestando por el hecho de que Ares le diera a Coman información del exterior. No vi que dijeran nada cuando Belén se enteraba de que estaba en plató su hija (fuera de cámaras, por supuesto). La respuesta de Ares fue también rápida y oportuna: “Ya es tarde, está hecho”. Así es. Esto es como lo de copiar en los exámenes, que se puede hacer siempre y cuando no te pillen. Y Ares solo desveló sus claves cuando fue preguntada por ello. Sombrerazo, una vez más.

En la postgala asistimos a una deliciosa y larguísima charla entre Coman, Aguasantas, Chari y Ángela, que bien podrían ser los finalistas, aunque lamentablemente sobraría uno si solo han de ser tres. El Coman que monta cutres espectáculos en el ‘confe’ a la hora de nominar (anoche se quitaba la camisa y bajaba el pantalón para protestar contra las injusticias en la casa) gana mucho cuando se pone a analizar el concurso. Tanto gana que entonces se convierte en uno de los concursantes más interesantes que he visto, auténtico merecedor del maletín.

Los tiene pillados a todos, lo cual demuestra que analiza con precisión lo que sucede a su alrededor al mismo tiempo que dosifica la información que comparte con propios y extraños. La charla de anoche fue deliciosa, de las que me hacen disfrutar como un gorrino. Tras la salida de Ares vi a ese grupo más sólido que nunca, también con las ideas más claras y sabiendo perfectamente el terreno que están pisando. La estrategia de Ylenia y Fede, esa carpeta resquebrajada que utiliza el anuncio de pedir hora sin cámaras cada semana para el viernes, día posterior a la expulsión, ha sido descubierta. También el objetivo de preguntas y comentarios maliciosos, que pretenden dividir al contrario. Por eso insiste tanto Belén en preguntar a Chari o Santi si no están incómodas con Coman, poco menos que tachándolo de pulpo rijoso. Pues bien, el tiro le va a salir por la culata.

Esta madrugada empezaron a preparar el terreno para hacerles creer en un acercamiento entre Chari y Coman. Tal vez una relación parecida a las de los ‘fedenios’, sin sexo ni pasión. Si finalmente lo hacen puede ser épico. De momento, Chari se ha acostado esta noche en la cama de Coman. Me relamo y me vuelvo a relamer. Igual me quedo corto con lo de épico.

Nominaciones

Estas fueron las nominaciones:

Chari - Fede 2 / Ylenia 1

Ángela - Ylenia 2 / Belén 1

Aguasantas - Fede 2 / Belén 1

Ylenia - Ángela 2 / Chari 1

Coman - Ylenia 2 / Fede 1

Fede - Ángela 2 / Chari 1

Belén - Chari 2 / Ángela 1

Con empate a cinco votos, resultaron nominados Ángela, Fede e Ylenia.

El grupo de Ares, cuyo liderazgo toma ahora Coman de forma especialmente activa, logró dar cinco puntos a Fede y otros tantos a Ylenia, quedando dos puntos sueltos, únicos que le cayeron a Belén. El factor sorpresa jugó a favor de la de San Blas al ir acudiendo al ‘confe’ sin saber quién había sido la expulsada. Allí fueron informados de lo sucedido, sin que tuvieran opción de rehacer sus estrategias. Por su parte, el grupo belenista decidió subir a la palestra a Ángela. Cinco puntos le dieron a esta concursante, y otros cuatro a Chari.

Destacar que solamente se pronunciaron los nombres de cuatro concursantes (Fede, Ylenia, Belén, Ángela y Chari), dejando sin votos a Coman y Aguasantas.

Moleskine del gato

Resulta que Fede necesita procesar la información de una forma muy peculiar. “Espera, que estoy metabolizando lo que me cuentas”, le dijo al súper cuando este le contaba que había sido expulsada Ares y Belén seguía en la casa. Me temo que metabolizar para él significa recordar algo tan sencillo como los dos nombres pactados y el orden en el que debía pronunciarlos, otorgando en cada caso dos y un puntos. El mueble italiano tiene una memoria aún más corta que su… lo que sea.

Kiko Rivera está indispuesto todos los jueves, como decía anoche Jordi. Es como un reloj. Cabía suponerlo por su apariencia teutona. Sistemático como él solo, cada jueves por la noche se encuentra malo, malo, de acostarse, como decía la Martirio.