Tomás Blanco.
8.00 h: Buenos días.
8.05 h: Todos dormidos: voy a ver la gala...
Bueno, bueno, bueno... estoy flipando.
9.00 h: Todos dormidos.
Vaya por delante que, como ya hemos hablado, estoy de acuerdo con la sanción. Pero sobre la gala, decir que empiezan mal porque las normas del programa que lee MM son lo suficientemente ambiguas para acoger al mismo tiempo a los que afirman que Flor y Julio han engañado y a los que afirman que de engañar nada, que todo lo han dicho bien a las claras (como muestran los vídeos). En estas circunstancias (y en todas las demás, pero especialmente en éstas) siempre es preferible vencer que imponer. Y siempre mejor que vencer es convencer. Pero imponer con saña ya es masacrar. La gente vitoreando y dando palmas, tampoco ayuda. Es arrasar porque sí. Porque tienes todo a tu favor para optar por convencer: mover a alguien con razones para que reevalue sus juicios o comportamientos. Tienes tiempo, opiniones contrastadas, vídeos, prompter, guión, redactores, dos concursantes que vienen en coches separados y que no parece que hayan entendido muy bien por qué están en la calle. Al final ¿Qué dice de ti que pudiendo convencer, impongas? Digamos que me ha parecido que MM ha estado desacertada. A mí me parece que se puede ser duro, severo, riguroso… sin ser cruel, despiadado o agresivo.
9.30 h: Todos dormidos.
Esto que sigue yo me lo saltaría. Lo cuento porque uno tiene sus propias obsesiones y porque me parece que se confunde lo “objetivo” con lo “honesto”, pero no os preocupéis que lo borro enseguida; difícilmente las obsesiones de un ser humano le interesan a otro: Imagina que ves un plano de una playa con música hawaiana de fondo. En serio, imagínalo. Dan ganas de pedirse un cóctel con sombrilla ¿No? Ahora imagina el mismo plano con la banda sonora de Tiburón. Ya verás cómo se te atraganta la sombrilla y todo. Quiero decir que la misma imagen no significa lo mismo con una música que con otra. El sentido (y lo que se siente) de la imagen cambia. Es evidente. El mismo razonamiento puede hacerse con los vídeo-resumenes y la alucinante insistencia en la objetividad: ¿o es que los zooms con redoble al careto del concursante que acaba de decir una tontuna son objetivos? Pero es que, en el mismo momento en que hay una selección de escenas para hacer un video ya convierte la narración (el vídeo-resumen) en subjetiva por definición: no pasa nada, no puede ser de otra manera. Esto no es cosa mía, se lee a Deleuze o a un par de estructuralistas y listo. Ahora, lo que me parece alarmante es proclamar que un vídeo es objetivo si el vídeo sólo contiene escenas que apoyan, argumentan o refuerzan una tesis (Flor y Julio son unos “montajistas”, digamos) y ninguna escena que apoye, argumente o refuerce una tesis contraria u opuesta (Flor y Julio no sabían lo que hacían), de modo que el espectador pueda sacar sus propias conclusiones al contrastar ambas tesis. Vamos, el tesis + antítesis = síntesis que nos contaban ya en el instituto cuando explicaban la dialéctica en filosofía. Quiero decir, que debemos pedir (incluso exigir) que los vídeos sean honestos (no tengo mucha queja, de momento), pero vale ya de dar la brasa con la objetividad. Siento el coñazo.
10.00 h: Todos dormidos.
10.20 h: Veo concursantes dormidos, pero escucho golpes, bisagras chirriando, martillazos. Operarios preparando la prueba de esta semana, supongo.
10.40 h: Los operarios dando voces.
11.00 h: Todos dormidos.
11.30 h: Casa blanquecina. Todos dormidos en los nichos. No hay rastro de los operarios.
12.00 h: Pues nada, aquí.
12.30 h: ¿Qué hacemos?
12.53 h: Luces encendidas en la casa blanca.
Ya es hora.
12.55 h: Sólo están despiertas Julia, Lidia y Lady Laura.
12.55 h: A Eduardo se ha despertado a las tantas porque le dolía la cabeza. Sale del nicho. Se escucha un ruido y Lady Laura entra en brote del tirón: "¡La Wii! ¡Eso ha sido un sonido de la Wii! ¡Eso ha sido un sonido de la Wii que yo me lo conozco!. Añade: "Tari-to-ti, tari-to-ta".
¿Voy a tener que narrar como juegan a la Wii?
¿Qué será lo próximo, por Dios vivo? ¿Otra vez a narrar partidas de póker, como por las noches?
Eduardo le cuenta un sueño a Julia, pero al realizador (tenemos otro Godard, famoso director francés del que se decía con recochineo que "en sus películas se ve crecer la hierba"), prefiere estos planos figurativos:
13.05 h: Godard intercala deliciosos planos de Dámaso y Marcelo durmiendo.
13.10 h: Anup durmiendo. Julia planchando en silencio. Lidia se pasea por el dormitorio con sandalias de tacón de andar por casa, leggins, top negro deportivo, coronado el conjunto con una trenzaca rubia a lo diosa nórdica.
Los vivos están en la cocina.
13.25 h: Godard insiste con el dormitorio. Lady Laura, Julia y Lidia hablan de ropa y peinados mientras Anup, Rubén, Dámaso y Marcelo duermen.
Después, Godard se recrea con unos planos de la casa vieja porque le gusta mucho el blanco y negro:
13.35 h: Julia y Eduardo hablando en el dormitorio. Pasan de un tema a otro, todos curiosos: no saben qué ha sido de Patricia (Edu cree que no la han hechado), especulan sobre el funcionamiento de la casa y las nominaciones (creen que hay una tercera casa) y hablan de la compra: Julia está sorprendida de lo que les pensaban dar. Lidia se incorpora a la conversación: "no saben comprar", dice.
13.40 h: Lady Laura se ha puesto un bonito conjunto peto de pantalón corto con camiseta azul y sufre dudas existenciales sobre si ponerse zapatos rojos de tacón, o botas rojas planas. Al final se decide por los zapatos utilizando el siguiente silogismo: "me pongo los zapatos, y cuando me canse, me pongo las botas".
13.50 h: El Súper informa que no pueden salir del dormitorio.
Por contexto deduzco que en la casa clara han escuchado a los concursantes de la casa vieja cuando fueron a por la compra grandísima y se encontraron con las sobras. Lady L. espera que les puedan dar algo de comida, aunque acto seguido dice: "Qué fuerte me parece, qué cabrones. Que con 100 euros se han permitido comprar tabaco, tía". En general, los cuatro (Edu, Julia, Lidia y Lady L.) flipan con la poca cantidad de comida que pensaban darles.
13.55 h: Sucede que los cuatro empiezan a poner ejemplos, analogías y razonamientos que ilustran lo malos que son en la casa vieja, pero nadie hace de abogado del diablo, así que, poco a poco, se están pillando un empute contra sus compañeros de primer orden, Julia a la cabeza. Ejemplos:
Julia: "Cuanto más lo pienso, más mala me pongo: yo no les daba ni agua". "Es muy fuerte, da vergüenza"
Laura: "La gente fuera seguro que dice: que se jodan"
Lidia: "Nosotros hemos repartido como compañeros, pero si hay algo impar nos lo quedamos nostros. Eso es ser compañeros"
(N. del T.: por ejemplo, si hay 5 paquetes, 3 para ellos y 2 para los otros.)
14.00 h: Están desataos. Julia, por ejemplo, dice que ha pasado "como en África", que ella ha oído a "gente expresarlo así: no les des de comer, enséñales a pescar". Y a ella le parece que "primero dales un pez, que recuperen un poco de energía, y luego les enseñas a pescar". Sobre el hambre que puedan pasar, Julia dice: "Ningún Gran Hermano se ha muerto". Julia exagera tanto las formas que distorsiona el fondo.
Eduardo es el que menos se deja llevar y cree que podría: "hacer la comida y pasársela". Lady L. y su clase proverbial contestan: "¡Que se la hagan ellos, a ver si luego les vamos a tener que limpiar el ojete, también".
Es un minipunto (porque unas gracias de caca-culo-pedo-pis son oportunas, y otras no).
14.10 h: Les dejan salir del dormitorio.
¡Ya!
Salen embrutecidos como los toros del corral. Se amontonan en la puerta.
Es una estampida.
Lady L y Julia a la cabeza, mugen enardecidas, empujadas por los demás. Problemas en la curva del pasillo: los tacones no sujetan bien y chocan con las paredes. El grupo se alarga. Salen trastabillando de la curva y tropiezan con la alfombra del salón. El cambio de superficie reagrupa a los zagales, aunque Lady L. conserva la primera posición. Sprint hacia el sofa....
Gana Lady L.
Llegan todos al sofá.
Desconcierto.
Ven los regalos.
Se monta un corro y lanzan gañidos guturales e inarticulados que terminan acompasándose en un cántico tribal escondido en el subconsciente desde el principio de los tiempos: eh-eh-eh-eh...
Bienvenidos a la nave del misterio.
Vamos, que un brote psicótico de tomo y lomo.
Les han instalado una Wii no-sé-qué-super-party. Con sus micros, sus mandos, su mesa de mezclas, su acuerdo publicitario y su todo.
14.20 h: Los fumadores a fumar al jardín. Los demás empapuzando a dos carrillos.
Julia, Edu y Lady Laura se terminan el cigarro y entran a la cocina. Qué bien, dice Lady L. ahora: "vamos a desayunar como personas", en la medida de sus posibilidades, se entiende.
14.30 h: La parte por el todo. Julia encuentra un trozo de tela (no sé de dónde) y dice:
-Yo con esto me hago un vestido que te cagas.
Y Lidia contesta:
-¡Huy! Es brillante, pero brillante, brillante, brillante... Me recuerda una cola de sirena.
Ya lleva dos monos cerebrales.
14.40 h: Edu y Julia en el jardín. Julia está un poco más calmada con respecto a la comida y ya no la tiembla el ojo cuando piensa en repartir un poquín.
Lidia vuelve del confesionario. Vuelve encantada porque la han visto súper feliz y súper animada, y es que, tía, ¿qué quieres?, con el armario lleno y con el día tan estupendo que hace ¿qué más puedo pedir? Hombre, estoy un poco triste porque no está Patricia...
Julia interrumpe: "uy, pues a mí me han hecho un favor, eh".
Minipunto.
Lidia tarda en recuperarse de un golpe que no esperaba, pero reacción:
-Para gustos los colores.
-Claro que sí.
Lidia lo pilla y se va a contar su cuento de Winnie de Pooh a otra parte.
14.50 h: Primer plano de Julia sola en el jardín. Fuera de plano Winnie de Pooh dice: "Bueenooss díiiias, Anup". Julia, al segundo, se incorpora: "Anup" y entra a la casa a limar asperezas: has visto que prueba más guapa y tal...
Anup responde tímidamente.
15.00 h: Winnie haciendo ejercicio. Dice: "Me encuentro taaan bien". Dice: "yo quiero una noche cenar ese arroz integral".
Luego descubre que les han instalado una especie de barra para hacer estriptis, supongo, y ensaya unos cuantos movimientos. Julia también se anima.
Os dejo con Paul. Hasta el lunes. Pasadlo bien y portaos mal.