9.00: Buenos días niños y niñas, queridos todos. Conectamos.
9.05: Todos dormidos.
9.30: Todos dormidos.
10.00: Sin novedad.
10.30: Todos dormidos.
Está bien, queridos comentaristas, os lo explico, que sois muy pesaos: l@s carpeter@s. Pues es una cosa que me dicen que inventé yo, pero ya no me acuerdo, porque fue cuando Marcelo y Laura se liaron en GH nosecuantos y porque se me olvidan esas cosas. Recuerdo por qué lo puse, eso sí. Resulta que que había mucha gente en los comentarios del blog inconcediblemente fascinados con Laura y Marcelo. Cualquier cosa, lo que fuese, era una prueba de amor verdadero, o bien una prueba de que algún maligno ser quería separarlos y no sé por qué me recordaban a esas adolescentes que van al instituto con la carpeta forrada de fotos de Justin Bieber o de Mario Casas o alguno de esos. Y empecé a llamarlas (casi todas chicas) carpeteras y al final lo terminó usando todo el mundo en los comentarios (cosa que ha pasado con otras palabrejas y motes que nos hemos inventado los bloggeros, como "entrar en brote", o GER... hay muchas, pero no me acuerdo de casi ninguna). Total, que todo el asunto de Marcelo y Laura en general era "la carpeta" (vaya carpeta hay montada en los comentarios, menuda carpeta tenenemos hoy, etc). Y cuando discutían Marcelo y Laura, establecíamos un código DEFCON en Carpetovetonia (que era el país de las carpeteras). Y cuando me dirigía a las lectoras carpeteras, ponía SMS adecuando el lenguaje al lenguaje que yo veía que ellas utilizaban en los comentarios del blog, por ejemplo, "amor verdadero" terminó convirtiéndose en "hamor berdadero" (otra cosa que luego he leído muchas veces por ahí). Y a veces, las ponía SMSs, así:
Esemese para mis carpeteras consentidas:
-¡Me ha mordido una choni!
-¡Al Hospital!
-Ya es muy T4rd3.
-¡Resiste!
-Thu EnViidiiah alim3ntah m3 fOrtalezz3
-¡Noooooo!
-seH
De paso tengo que decir que aquellos personajes eran más divertidos de minutar que los de este año que de momento, o no dan mucho juego o cuando dan juego lo hacen de tal manera que te quedas tan perplejo que no sabes qué decir, como ayer Carolina que durante el juego de las preguntas no sabía cual era la capital de Usamérica o dijo que el gentilicio de Barcelona era la Sagrada Familia.
11:00: Todos dormidos.
11.30: Sin novedad.
12.00: Sin novedad.
12.30: Todos dormidos.
12.35: Música. Calle 13. No es mi rollo, pero por lo menos no da vergüenza ajena (y la letra tiene unas cuantas imágenes realmente cojonudas). Quizá por eso, aunque seguramente porque se han ido a dormir como a las ocho de la mañana, hoy la mayoría se quedan en la cama.
12.50: Clásicos minutos de nada mañanera, hasta que en el baño damos con Carlos, Ivy, Vera, Niedziela, Sofía, Marta, Carolina y Quique. Anoche, muy de madrugada, tuvieron bronca por la comida y parece que la bronca colea. Hablan todos al tiempo en conversaciones paralelas y solo pillo cosas sueltas. Lo suficiente para saber que tiene que ver con la comida de anoche. Pero el problema real, amigos, es que no tienen ningún problema real, de manera que cogen cualquier problema sin importancia y lo convierten en un problemón irresoluble, porque las formas de vida con tendencia al intercambio psíquico son así y lo peor es que dicha tendencia les va a llevar a repetir la misma conversación una y otra vez. Esta conversación consiste básicamente en:
1. Recordar el conflicto una y otra vez, para determinar con absoltua exactitud cómo sucedió, quién dijo qué, quién hizo qué, en qué orden se dijo y se hizo con el fin de llegar a la única conclusión posible: el otro es malo.
2. Añadir los detalles que más duelen del terrible comportamiento del enemigo, tanto del conflicto en sí, como de cualquier otra cosa mala que haya hecho el enemigo en cualquier momento del pasado. Por ejemplo, a Ivy le molestó que después de comerse lo que se comiesen los que se lo comiesen (que me imagino que son los que no están aquí) se limpiasen las grasientas comisuras de los labios mirándola a los ojos con descaro y poniendo cara de satisfacción.
3. Reelaborar cualquier comportamiento del pasado que a la luz de la nueva situación (punto 1: el otro es malo) significa algo completamente distinto. Por ejemplo, antes, Han está un poco loco, pero hace la comida y eso está muy bien. Ahora, Han lo que quiere es tener la comida controlada para luego levantarse por la noche y ponerse las botas sin que nadie se entere.
4. Poner ejemplos que ilustren lo injusto, egoista y maligno comportamiento del enemigo siempre comparándolo con el angelical comportamiento de uno. Por ejemplo: una cosa es comerse 2 galletas de más con nutella, o tres, dice Marta, y otra cosa es esto.
5. Pasarse el día mirando otras cosas que el enemigo hace necesariamente mal y añadirlas a la lista. En este caso, Marta encuentra toallas sucias o algo así porque nadie lava las cosas. Así que procede al punto 4 (el otro es malo y yo bueno): yo llevo 15 días con la misma bata y aquí hay gente usando toallas limpias todos los días. Añade: luego me abuchean, pues ya voy a sonreír otra vez cuando me abucheen (traducción: mira si el otro es malo que con lo buena que yo soy me abuchean y encima sonrío -porque soy muy buena- pero ya no más, porque está visto que portarse mal es lo que gusta aquí, así que caiga sobre vuestras conciencias que estáis haciendo a una persona buena comportarse mal, cabrones).
6. Repetir.
Es un bucle nuevo. Todavía no le he puesto nombre. Se admiten sugerencias.
13.05: Marina fregando. Sola en la cocina.
13.15: Marina fregando sola en la cocina. Suso durmiendo en el dormitorio.
13.20: Han y Aritz durmiendo.
13.22: Ivy mirándose al espejo en la cocina, declara: me ha salido un grano del estrés, tía. Es muy jevy, tía. Que nunca me salen graaaanooooos. Hoy me voy a maquillar, tía.
Me quedo más tranquilo.
13.27: Desayunando. Tienen que aguar la leche para hacerse el colacao. Además, debe de haber algún problema con el microondas (si lo hubiere) porque Ivy y Niedziela se están tomando el café frío. Creo que hablando de si echar agua caliente o no a la leche, Carlos declara: "saber sabe igual, pero está más rica" y noto un leve mareo, pero cuando declara que nosequién le ha: "quitado el secador, por eso tego yo estos pelos" sufro un leve ataque de hipoxia y a mi pierna izquierda le da un calambrazo involuntario y creo que he desconectado el cable del ADSL. Enseguida vuelvo.
13.35: No. Todo va bien. Nada destacable: hablan del desayuno y de la prueba.
13.40: Hablando sobre si en la prueba de hoy tendrán que usar un patienete, Vera diserta sobre las diferencias entre patín, patines, skate y scooter. Muy interesante. Lo voy a anotar todo con este regaliz.
13.50: Amanda habla con Suso y Raquel. Suso y Raquel están en la misma cama, conste. Amanda está señalando la incongruencia de algo que tiene que ver con la gestión de la fanta de limón en función de la cantidad de líquido que quede en la botella. Intento prestar atención, pero no lo consigo.
Palmada.
Raquel declara que no entiende que la gente se haya puesto como se ha puesto por una patata. O sea, que anoche alguien se comió una patata con bacon y huevo y no se lo han dicho a los del bucle. Los concursantes que han cometido la ofensa también entrarán en bucle, lo que pasa es que todavía no podemos determinar las características del mismo porque no han hablado suficiente (están en la cama, a pesar de la insistencia de Amanda en darles el coñazo). De momento, el primer rasgo claro es minimizar el conflicto: nótese como obvian constantemente el huevo y el bacon de la ecuación: "se ponen así por una patata".
En el vestidor, Carlos ya está en bucle:
·Del punto 1 (recordar el conficto) dice: abrieron el paquete un cachito.
·Del punto 2 (recordar otras cosas malas y añadir detalles): Pero me acuerdo el otro día... Y va y todavía me dice es que yo no me arrepiento de nada.
·Del punto 4 (ejemplos de lo mal que se porta el otro en comparación con uno): Yo me he ido a dormir con tres vasos de agua, que me levanté con un hambre que te cagas, que tenía el estómago dado vuelta, y lo que no me parece justo... Yo lo vi y podía haber ido a la despensa y coger una bolsa de patatas y ponerme a comerla diciendo: "ah, lo siento, es que tenía hambre", pero no lo hago, porque no somos dos, tía, somos 14 y a mí no me sale... El otro día abrí el paquete y lo repartí entre seis, dice Carlos. Y yo no comí, dice Marta.
Además, cuando uno se queda sin afrentas, puede imaginar afrentas futuras: porque nos hemos enterado, que si no nos enteramos, lo siguen haciendo. O bien: hoy es esto, pero ¿qué será lo próximo? hoy es una patata pero mañana serán 6 o 10.
14.00: Pues esto es lo que está pasando:
Excepto para las carpeteras, la konversación nO tieNeH iNTerEEssssH, tía. Suso hace comentarios a Raquel sobre el hecho de estar juntos en la cama, nada que confirme que estén juntos. Y la besa constantemente, pero no en los labios, así que tampoco son besos confirmativos. Lo que más me gusta es cuando Raquel cuenta que:
-Mis amigas estarán flipando.
-De que estés aquí revolcándote conmigo -dice suso cegado por su propia alucinancia.
-No. De que he engordao, tío.
-Estás guapísima.
-He engordao. Además, aquí no puedo hacer lo que haría en mi vida normal. En mi vida normal ahora me lavaría el pelo y iría a la esteticién...
-Yo tampoco puedo hacer nada de lo que hago en mi vida normal -dice Suso. ¿Y qué cosas hace en su vida normal que no puede hacer aquí?-: depilarme...
14.10: En el baño hay 3 mujeres mirándose al espejo mientras ponen los mismos caretos que ponemos los tíos al afeitarnos sólo que ellas se pasan una especie de brocha por la cara. Una de es Sofía, que asegura que ha soñado algo y que en el sueño Suso le decía a Raquel algo como que sentía algo por ella, por Raquel, no por Sofía. El caso es que Sofía no se aclara y no se acuerda bien, pero algo de eso era, y ella tiene sueños premonitorios, tía, que te lo digo yo, que cuando sueño algo, luego pasa, así que ya verás como de la nada ahora resulta que se han enamorado. Efectivamente, amigos, una vez más Sofía con la canción de la despechada. Las demás, por supuesto, la ignoran olímpicamente. Ese no es su bucle.
14.20: Conato de bronca en la cocina. Carlos empieza a recordar la bronca de ayer, pero el Súper, en vista de que la conversación ya nos la sabemos aun sin verla, nos lleva al vestidor. En el vestidor, Sofía está cantando otra vez la canción de la despechada. Se la canta a Niedziela, la pobre, que trata de pintarse la raya del ojo y se va a salir de los márgenes. Sofía sigue empeñada en que los demás compartan su indignación y no parece darse cuenta de que los demás se la quitan de encima.
14.35: Algo me pasa con Amanda. O sea, yo sé que ella habla, pero es como si tuviese instalado en el cerebro uno de esos aparatos que bloquean la señal de los móviles cuando ella habla. Algo está contando por cuarta vez y todavía no lo he entendido. Creo que tiene que ver con que es una persona que en lugar de decir: "pásame la sal", diría algo sin comas y más o menos así: yo de verdad te lo digo que no te lo diría si no la quisiese pero la quiero ¿sabes? igual con otra comida no pero con spaguetis me apetece no sé yo por que ¿sabes? pero el otro día yo quise sal y por no pedirla luego se me olvidó y al final me quede sin ella así que con la mano en el corazón pásame la sal.
Sí, algo parecido.
Palmada.
La cosa es que ella fue al confesionario a por nosequé y el Súper le dijo que ya que estaba ahí, se quedase para que le contasen de qué va la prueba y para que le diesen la hoja con las instrucciones. Total, que eso se criticó el otro día, dice, así que le dijo al súper que no quería hacerlo.
14.45: Vamos a la prueba. Los concursantes se disfrazan (lagarto, vaca y alguna cosa más que no identifico), se suben en un patinete (como el que usa Marty McFly para burrear a Biff en Regreso al Futuro pero antes de que le arrancase el manillar). Tiene que bajar por una rampa y dar una vuelta por un circuito sin caerse.
15.00: Nada que contar de la prueba. Se disfrazan, dan la vuelta al circuito, que más que un circuito es una rampa de 5 metros. Los demás aplauden y animan. El señor japonés dice cosas en perfecto japonés con acento de Kioto. Cotorreo intrascendente sobre la prueba y las normas. Al fondo escucho a Marina hablando de libros, pero afortunadamente, no distingo lo que dice.
15.10: Han se hace el histérico disfrazado de vaca. Tiene que bajar por la rampa y grita como si no llevase un casco, rodilleres, coderas y muñequeras.
-Deja de hacer tontadas, Han -dice Aritz.
Minipunto.
-Es que tenía mucho miedo de hacerme daño con eso de ahí -lloriquea Han. Así que Aritz le dice:
-Bueno, sí, llora un poquito, anda.
Minipunto.
Marina es la primera en caerse de la rampa. Lo intenta una segunda vez y también se cae. No se hace daño ninguna de las dos veces, sin embargo, se pone a llorar.
Carolina cree que el gentilicio de Barcelona es la Sagrada Familia, ahora, se puede ganar la vida perfectamente bajando por cuestas con patinetes. Su familia puede estar tranquila que tiene el futuro asegurao.
15.15: Marina lo vuelve a intentar y no se cae de la rampa, pero se choca contra los colchones. Inmediatamente se pone a llorar.
¿?
El señor japonés va a consolar en perfecto japonés, pero el perfecto japonés es uno de esos idiomas que en cuanto te hablan alto parece que te están echando la bronca, aunque se le agradece la intención. Por otra parte, no dejo pensar en qué estará pensando él; es bien sabido que lo de mostrar emociones en público es algo que les molesta especialmente.
15.20: Debaten sobre si Karate Kid es "en japón o en china", cuando cualquier persona con un mínimo de geometría y teología sabe perfectamente que el señor Miyagui es de Okinawa, hombre ya.
15.25: Termina la prueba (igual han cambiado de turno, pero no les he visto entrar).
15.35: Vera, Carlos, Quique y sofía en los Sofales de mimbre del jardín. Hablan de la ropa que tienen. Carlos insiste en hacer declaraciones francamente alarmantes como: esas zapatillas molan mucho, pero es que yo tengo el pie muy grande, y en un 45 esas zapatillas no molan, así que me compre otras que también estaban muy guapas. O: "Tengo una pero en XL y me va anchita". (el diminutivo es de él, lo juro).
Cuando vuelvo de vomitar, escucho a Suso aleccionando a las muchachas sobre por qué no hay que fumar, pero luego voy a su blog, lo leo un rato, y me siento mucho mejor. Es algo que os recomiendo profundamente amigos. Cuando las cosas os vayan mal, estéis tristes, tengáis pesambre, regomello, anguistia existencial adolescente, bipolaridad, ciclotimia, conflictos edípicos sin resolver con el padre... cualquier cosa, amigos: id al blog de los concursantes y leed una entrada. Alivia muchísimo comprobar que hay gente que está mucho peor que tú. Si no tenéis internet a mano, también vale con Mujeres Hombres y Viceversa. Para que luego digan que Telecinco hace mal a la sociedad. Qué poca vergüenza, amigos.
15.45: Después de un rato de intercambio psíquico entre Carlos y Sofía, vuelven a hablar de zapatillas, y es gracioso que luego sean estas las mismas personas dicen que noséquién no tiene conversación. En el tocador, Raquel se alicata y Suso es el que da conversación nivel "Estudias o trabajas".
-¿Y tú de dónde decías que eras?
En la cocina, Han y Aritz cocinando. Marina observa (sin llorar).
Han canta una canción:
putón putón
putón verbenero
putón putón
putón verbenero
(bis).
Y como a mucha gente que utiliza la expresión "putón verbenero", Aritz tiene que explicarle a Han que demonios es una verbena.
Por lo demás, Han declara que no va a comer. Aritz declara que si Han no come, él tampoco. También dice que alguien (no entiendo el nombre) se "ha disculpado conmigo por lo de anoche".
Aritz sigue cocinando. Han sigue cantando a pleno entendimiento.
15.55: Han sigue cantando. Aritz dice:
-Cambia de canción, pichín.
Minipunto.
A Han no se le ocurre nada. Aritz dice:
-Venga, que tú sí que escuchas música buena, buahh.
Minipunto.
Han entra en brote y canta una canción disco en élfico. Aritz, que tiene un cuchillo en la mano, dice:
-¿Qué mezclas, chino e inglés?
-Es coreano -dice Han.
Minipunto.
Entra una avista. Han grita.
-Cállate -dice Aritz.
Minipunto.
Aritz mata a la avispa (aunque me informan de que Aritz no mata bichos, los captura vivos y los lleva al confe en un tarro).
Han canta:
-Putón putón / putón putón verbenero / putón verbenero.
16.00: Suso y Raquel abrazados en el sofá. Verlos y bostezar es todo uno.
16.15: Pues siguen de intercambio psíquico. No sé cómo resumir esto. Digamos que hay tres líneas básicas de conversación. La primera es que Raquel está asustada y tiene miedo de salir expulsada. Tampoco quiere que se vaya Amanda. Habida cuenta de la personalidad de la pardala, es la típica forma de vida que sólo sabe pensar en el problema y nunca en la solución, de manera que va a seguir así hasta la próxima gala por lo menos. La segunda línea de conversación es un relato de identidad. Como toda relación (y como toda persona) tiene una identidad y esa identidad es un relato que cuenta quienes son como pareja. Así que repasan acontecimientos, como la primera noche o la primera fiesta, etc. y reelaboran lo sucedido para justificar que ahora están juntos. Es decir, construyen un relato de identidad. La tercera línea de conversación trata sobre lo guay que Suso cree que es con declaraciones como: "Chicas, lo sentimos, pero Suso cuelga las botas. Sé que será duro, pero..." o: "no te dije nada al principio porque no sabía como entrarte. A mí nunca me ha hecho falta entrar a una mujer y tú no me dejabas ni un hueco y tenía que pensar como lo hacía" (esta también vale como ejemplo de construcción de identidad, ahora que lo pienso).
16.30: El realizador decide por fin cortar al jardín, pero lo primero que escucho es a Carlos decir:
-Nosotros hablamos de mil cosas, no nos pasamos hablando de ellos todo el día. De mil cosas.
Repasemos: zapatillas, ropa, pelo, normas de convicencia.
Sigamos.
-Están jugando a saco -dice Quique. Hablan de Suso y Raquel.
-Están jugando conmigo -dice Sofía, despechada.
-Están jugando y tú entras en el juego -dice Quique, porque a él le interesa dejar claras algunas cosas.
-A mí me ha dicho muchas veces que no se la tiraría -dice Marta, que insiste mucho en los puntos 2, 3 y 5 del bucle.
-A mí me ha dicho también que Raquel tenía la cara bien, pero que de cuerpo no valía una mierda, palabras textuales -dice Sofía.
-Hay personas que por tener un beneficio les da igual todo, eh, les da igual ocho que ochenta -dice Quique, porque él sigue a lo suyo.
-Lo están haciendo porque les interesa perjudicar a Amanda -dice Carlos en otro de sus mil temas de conversación-. Amanda está quedando como la mala y no gana nada y eso la gente lo tiene que ver.
Y acto seguido se enzarzan en asegurarse los unos a los otros que la gente está viendo seguro, fijo, el mal comportamiento de Suso y Raquel y que asimismo está viendo lo bien que ellos se comportan. Para reforzar sus opiniones utilizan los gritos que han escuchado del exterior y los abucheos y aplausos que escucharon el día de la gala.
Finalmente, entran en el bucle, tal como está detallado anteriormente.
Es muy significativa, dicho sea de paso, la insistencia de los concursantes en dos frases muy sintomáticas que repiten todos ellos con insistencia:
-Yo no soy tonto / Yo no soy gilipollas / Yo no soy imbécil.
-A mí me la suda / A mí me la pela / A mí me la toca.
Suena la señal: hora de comer.
Gracias a GER.
16.45: Todos hablando en el comedor al mismo tiempo. Hasta que el realizador no se centra en Amanda y Raquel, solo se escucha un griterío. Raquel le expilca a Amanda que teme que Sofía sea percibida como una nueva Paula. Amanda cree que no tienen nada que ver porque no tienen un caracter parecido Paula y Raquel, aunque a mí me parece que lo que no se parece en nada es la situación. Raquel y Suso se van a alguna parte juntos. Sofía canta la canción de la despechada. Marta repasa los puntos 2 y 3 del bucle porque es un encanto de muchacha.
16.55: El Súper llama a Marta al confesionario y vuelve con las instrucciones de la prueba. Tienen que comer algo (presuntamente asqueroso). Si tienen el plato y la boca vacíos cuando termine el tiempo, ganan un punto. Si no se lo comen o si vomitan o algo, 0 puntos. Terminan de leer y se dispersan por el salón. Por algún motivo indeterminado, Han y Sofía terminan haciendo cucamonas en el sofá y por otro motivo más incomprensible todavía, Carlos, el hombre de los mil temas de conversación, dice:
-Han, a ella también la puedes dar por culo.
-Yo no tengo culo -dice Sofía.
-No. No quiero -dice Han.
-¿Por qué no? Si el culo es lo mismo ¿no?
-¡No! -dice Han-. No quiero.
-¿Y con la luz apagada? -pregunta sofía.
-No -dice Han.
Luego Carlos dice algo que tiene que ver con anos y con correas y no lo he entendido bien pero me alegro porque Han le llama asqueroso repetidas veces. En ese momento, el realizador corta la conversación y la sustituye por el logo de un ojo de Gran Hermano, que está basado claramente en HAL 9000, el ordenador descontrolao de 2001 Odisea en el espacio, que termina decidiendo por su cuenta lo que es o no conveniente para las formas de vida pertenecientes al género humano y claro, uno ve el corte y piensa regular.
17.00: Pues me despido con el personal de cotorreo en el sofá del salón, haciendo tiempo hasta que empiece la prueba.
Ya es hora. Nos vemos el próximo sábado. Andad por lo segao.