Una banda de butroneros “sensacional”

Malena Guerra/ Ángel Moya 12/04/2013 19:18

Al líder de la banda le llaman “Sensación” por su apellido, Sen. Cuando la policía entró en su lujoso piso no encontró los 300.000 euros en joyas y relojes que buscaban de los robos cometidos pero sí un vestidor repleto de bolsos y zapatos de la novia del butronero. Es la ex compañera de otro famoso delincuente, uno de los hermanos Bote Vargas. Ella, conocida por sus gustos, se quedaba con parte de los botines. Me contaba uno de los agentes que participó en el registro, que los bolsos, la mayoría robados, todavía tenían el relleno y la etiqueta a pesar de que lucían en las estanterías muy ordenados. El resto se ofrecía en el mercado negro. De las joyas solo encontraron las piedras preciosas que quedaron tras fundir el oro. Para ese menester la banda tenía un perista.

Para otra de sus especialidades, las platerías, los butroneros tenían un miembro de la banda, más concretamente hermano, trabajando en la empresa que gestiona las tres platerías reventadas. El sujeto tenía carnet de vigilante privado. La banda no tenía querencia por las platerías pero la plata se paga bien porque ha aumentado su valor con la crisis y porque ahora se usa de conductor en vez del cobre. Tener alguien dentro suponía un valor seguro para dar varios golpes certeros, rápidos y limpios. Además de desactivar las alarmas, también borraban o se llevaban las imágenes de las cámaras. Eso impidió a los investigadores de la Unidad de Crimen Organizado disponer de fotografías que ayudaran a poner nombre a los delincuentes.

Aun así hace unos meses ya los tenían centrados. Cada vez que en la televisión contábamos un butrón, ellos se llamaban para comentarlo. La sorpresa es que en sus conversaciones hablaban de uno de los butrones más cuantiosos ocurridos en Madrid. Hace un mes varios miembros de la banda, en concreto el Piti y el Rata decidieron actuar por su cuenta y fueron pillados in fraganti en un taller de Platería. Los agentes no encontraron ni rastro del suculento botín que los investigadores buscaban sin descanso. La preocupación era justificada porque los objetos se estaban moviendo en los circuitos delincuenciales de la capital y parte podía estar saliendo al extranjero.

Ahora ha caído el resto de la banda y tampoco han encontrado el famoso botín porque nada tiene que ver con él. La banda de “Sensación” tampoco ha sido nunca sospechosa del robo a Belén Esteban. En realidad por lo que ha salido el nombre de la Esteban en la investigación es por otra curiosa coincidencia que no viene a cuento.