La policía se contradice en un nuevo informe sobre la grabación de Nicolás: Ahora no sabe si fue manipulada

telecinco.es 22/04/2015 08:28

El nuevo informe ha insuflado aire a la defensa de Francisco Nicolás que ha descargado gran parte de su estrategia en demostrar que la grabación que se filtró a los medios en febrero no fue manipulada.

La famosa grabación se efectuó en 2014 días antes de la detención de Francisco Nicolás y recoge una reunión en sede policial entre dos agentes del CNI, y el comisario jefe de Asuntos Internos junto a dos de sus policías que comandaban la investigación contra el jóven. La grabación demuestra que el CNI ya había intervenido el teléfono de Nicolás (todavía no figura en el sumario si con permiso o no) antes de que la policía pidiera permiso al juez para hacerlo más adelante. Además, según la defensa de Nicolás, también se escucha como se habla de "lavar pruebas" del caso. Alguno de los presentes, sospechan los propios policías en sus informes, era un traidor que capturó con su móvil la conversación y la envió a un tercero que la grabó y distribuyó a los medios. Desde entonces, el despacho de Israel Paz y Víctor Sunkel, abogados del jóven, se esfuerza en demostrar, a través de informes periciales, que la grabación no fue manipulada antes de su distribución y por tanto podría provocar la nulidad de todo el caso Nicolás.

Fueron dos periodistas los que entregaron una copia de esa grabación a Asuntos Internos informándoles de que se les había grabado de forma ilegal. Y aún más, que esa copia se la había facilitado una fuente del Ministerio de Interior añadiendo aún más gravedad al caso. Asuntos Internos se la remitió al juez y éste les ordenó que elaboraran un informe que en el mes de enero concluía que la grabación había sido "alterada" y no se decía nada de "lavar pruebas" ni de pinchazos ilegales. La defensa de Nicolás presentó otro informe pericial insistiendo en que esa copia de la grabación NO ESTABA MANIPULADA y por tanto el caso pendía de un hilo. El juez, no satisfecho con el primer informe, ordenó a la policía que identificara la identidad de los cinco protagonistas de la reunión y un nuevo informe en profundidad sobre si estaba o no manipulada la grabación del encuentro.

Y entonces llegó el viernes pasado el turno de declarar del comisario Villarejo, conocido por sus trabajos de inteligencia para la policía y su enemistad con el comisario jefe de Asuntos Internos responsable de la investigación a Francisco Nicolás. Ese comisario, Martín Blas y su unidad, vinculan la grabación ilegal y su posterior distribución al comisario Villarejo en presunta connivencia con Francisco Nicolás en una maniobra para apartarles de la investigación. Villarejo no tiró de la manta ante el juez Zamarriego, que le aclaró en varias ocasiones que de hacerlo tendría que ser con nombres, apellidos y pruebas. Tampoco permitió las preguntas de la defensa de Nicolás al comisario sobre si la grabación estaba manipulada o no. Villarejo decepcionó a la defensa de Nicolás cuando declaró al juez que no tenía constancia de que se hubieran manipulado pruebas del caso, pero en la respuesta tendía la mano a Nicolás. "¿En las reuniones con los investigadores sobre ésta grabación alguien dijo que estuviera manipulada?" preguntaron los abogados. "No, nadie lo dijo, nunca lo escuché" respondió el comisario dando la grabación por buena y echándole un cable a la defensa de Nicolás. Villarejo le hizo un favor, leve, pero al fin y al cabo un respiro para Nicolás sin levantar ningún escándalo.

Y finalmente ahora, apuntillando el asunto, la policía acaba de remitir un segundo informe sobre la grabación al juez en el que se contradice respecto del anterior. Si en Enero la policía científica concluía que la grabación había sido "alterada", ahora en abril la policía científica concluye que:

"La grabación no es la original auténtica, es una copia.

La grabación empieza con la conversación entre policías y agentes del CNI ya iniciada y termina antes de que la reunión se de por finalizada.

No es posible determinar o no intencionalidad en las diferentes anomalías que refleja el estudio sobre la grabación."

Resumiendo, que la grabación es una copia (algo que ya sabía hasta el juez sin quitarle ápice de validez), que no comprende la reunión policial en toda su extensión...y que no se puede saber si está manipulada intencionadamente o no por el ruido y la mala calidad del audio. Algo contradictorio con el informe anterior, de la misma policía, que aseguraba que había sido manipulada. La defensa de Nicolás ha recibido la noticia con alborozo, las acusaciones con estupor aunque insisten en que no es suficiente para tirar el caso.