Qué alegría. Por fin vamos a vernos tras tu odisea somalí de casi 40 días. Unos días que han sido duros. Mucho para tus amigos, pero sobretodo para tu familia. Tu hermana Julia ha sido el ancla sobre el que ha gravitado todo. Tus padres por fin van a poder respirar. Y nosotros.
No me importa cuanto ha tenido que pagar el gobierno español. Para eso está. Sé que las negociaciones se han llevado con mucho sigilio, y que el papel de Martín Cinto, embajador español en Kenia, ha sido clave. Tu hermana ha estado en todo momento informada. Y con ella los amigos. Luismi, Luismi Segovia, Javi, David Canario, Vallano, Ceci y desde hace un mes y dos días, el pequeño Martín. Ya lo viste en fotos. Te espera en Madrid.
Veo en las fotos que estás más delgado, pero la mirada es la tuya. Esa cara de retranca, sorna y escepticismo que tanto te caracteriza.
Este blog va sobre viajes, y el tuyo ha sido de los inolvidables. Tenemos que charlar sobre ello con una cerveza en la mano, antes de que continúes con tus planes de seguir enseñando al mundo aquello que no quiere ver.