Wolff pide evitar "una guerra sin cuartel" entre los equipos para evolucionar los motores de cara a 2016

"Nadie puede estar a favor de una guerra sin cuartel en 2015. Ninguna compañía seria permitiría que eso pasara y ningún suministrador de motores puede permitirlo porque los gastos se dispararían fuera de control. Es irresponsable", avisó Wolff ante la prensa.

El responsable de Red Bull, Christian Horner, advirtió en el pasado Gran Premio de Brasil de que la falta de acuerdo entre los equipos para cambiar los reglamentos de cara a 2016 podía desembocar en una 'guerra' de gastos económicos.

El equipo austriaco y Ferrari han pedido cambios en las reglas para alcanzar a Mercedes, que cuenta con la unidad de potencia dominante. La escudería germana había ofrecido una solución, rechazada por sus rivales, y el resultado ha sido la congelación de las normas, ya que se requiere unanimidad. Sin embargo, de cara a 2016 bastaría una mayoría absoluta en la votación para cambiar las normas.

"Renault (suministrador de Red Bull) y Mercedes están completamente alineados en su estrategia de motores. Si cambiamos el formato, puedo garantizar en que Renault y Mercedes no estarían interesados en suministrar nuevas unidades de potencia", zanjó Wolff con contundencia.