Fotografiarse con un muerto momificado le ha costado su puesto de trabajo al enterrador de Guardamar del Segura (Alicante). Los restos del fallecido, que murió hace 23 años, iban a ser trasladados para ser enterrados con su mujer pero al ver que el cuerpo se había momificado avisó a los familiares, que decidieron inmortalizar el momento.