Alessandro comenzó la defensa de su ex aludiendo a las múltiples contradicciones publicadas respecto a la supuesta conversación telefónica en la que la Obregón ordenaba a su 'sicario' que le propinara una paliza a Jaime Cantizano. Poniendo como ejemplo, la supuesta transcripción de la llamada publicada por el periódico El País, en el que se afirma que Ana le preguntó a su guardaespaldas si conocía a alguien que le pudiera pegar una paliza al señor Cantizano, mientras que en Interviú se asegura que Ana le dijo que tenían que avisar a los Miami, una banda criminal, para que le pegaran la paliza.
Sin embargo, recalcó que lo realmente grave fue que un programa de televisión organizó una encuesta pública para saber si el público quería o no, ver el culo de un menor. "Un programa de televisión jugó con el desnudo de un menor y no sólo utilizó el desnudo para atraer a la audiencia sino que ganaron dinero con aquello porque las votaciones eran llamadas a números de pago".
Sin dejar en ningún momento de defender la inocencia de Ana Obregón, Alessandro volvió a aludir al valor de credibilidad que pueden tener unas palabras dichas en un calentón de una madre que ve vulnerados los derechos de su hijo. Además, aseguró que Anita había trabajado durante más de 10 años con ese guardaespaldas y que por lo tanto entre ellos existía cierto grado de confianza y era posible que la actriz hubiera pronunciado esas palabras pero, nunca con la intención de que llegaran a cumplirse.
"Ante un hijo agredido una madre no entiende ni de leyes, ni de hechos, ni de nada. Para ella lo único que existe es su hijo".
Ante la acusación de algunos de los colaboradores de que estaban utilizando la cuestión del menor como una defensa desesperada ante una acusación de tal magnitud, Alessandro quiso aclarar que fue lo que sucedió un año atrás. Para ello, comenzó apelando a la directiva de la cadena, quién fue testigo del estado de malestar en el que se encontraba la bióloga, quien pensaba que el resto de cadenas también iba a emitir dichas imágenes.
Unos hechos que según Lequio, llevaron a una madre desesperada a acudir a la fiscalía de menores para que paralizaran la posible emisión del desnudo de su hijo menor. Sin embargo, Alessandro aseguró que Ana en ese momento no tramito ninguna demanda en contra del programa, presentador o productora.