Marianela Olmedo: "Voy a luchar hasta el final porque es lo único que me queda"

telecinco.es 30/01/2018 11:47

El 27 de abril de 2013 marca un antes y un después en la vida de Marianela, una mujer que ha perdido a su hija de tan solo 8 años y al padre de ésta de una manera muy violenta. Francisco Medina, con el que mantenía una relación sentimental en esos momentos, es detenido un año y medio después de los hechos como responsable de los dos asesinatos. Dado que una amiga de Medina lo sitúa en otro lugar minutos después de las muertes, después de tres años en prisión, Francisco es puesto en libertad en octubre del año pasado al conseguir que un Jurado Popular lo declarara inocente.

Francisco se convierte en víctima para los vecinos del pueblo y su puesta en libertad es recibida entre aplausos. En cambio, Marianela ha sido acosada y se ha visto obligada a cambiar de domicilio. Sin embargo, está decidida a luchar para meter al asesino de su hija en la cárcel por lo que hace apenas unos días, ha recurrido la decisión de absolución de Francisco Medida. Hoy en ‘El programa de Ana Rosa’, nos explica sus motivos.

AR: En un primer momento, ante el horror de encontrar en la casa a tu niña y tu marido muerto, no crees que haya sido tu pareja el asesino

No, ese día que asesinaron a mi hija y a Miguel Ángel, me asesinaron a mí. En ese momento estaba loca, en otro mundo.

AR: ¿Qué te dijo él?

Él me acompañó en casa después de haber enterrado a mi niña y a su padre, yo estaba medicada en la cama todo el día y me autolesionaba. Tuve varios intentos de suicidio.

AR: ¿Cuándo empezaste a creer que él puede tener algo que ver con el crimen?

Cuando la UCO me hacía muchas preguntas sobre él. La Guardia Civil me pregunta mucho por él, pero yo estaba con mi dolor y no se me pasó por la cabeza que él hubiera hecho semejante crimen.

AR: ¿Y cuándo piensas que él es el autor?

Cuando le detienen 14 meses después de cometer los asesinatos y empiezo a darme cuenta de muchas cosas porque vuelvo a ser yo. Me tenía anulada como mujer totalmente. Entró en mi casa como si le hubiera quitado el puesto a Miguel Ángel, no lloraba ni decía nunca que qué lástima lo de la niña. Cuando la Guardia Civil te expone lo que hay, los jueces le ponen en prisión y el fiscal le acusó se me cayó la venda de mis ojos. Era muy celoso y dominante, prepotente... Me quería solo para él y tenía celos de mi marido. Aunque llevaba 28 días separada de mi marido, había estado 20 años con él y le quería con toda mi alma.

AR: ¿Te separaste por tu relación con Francisco?

AR: ¿Y mantenías una buena relación con tu marido?

Sí, una relación maravillosa, pero sin que lo supiera el individuo este. Hablaba con él habitualmente, pero borraba las llamadas que tenía con él para que no las viera. Mi hija era lo primero, era lo que más quería en el mundo y Miguel Ángel también. Por eso teníamos una relación muy buena.

AR: Que yo sepa no es delito ir a una clase de baile…

Me apunté a los dos años y medio de morir mi hija. Necesitaba tener mi cabeza ocupada. Tomo mucha medicación y me sentía culpable. Mi psicóloga me recomendó que me apuntara a clases de baile y lo hice por terapia. No hace falta que me castiguen porque ya lo hago yo todos los días. El sentimiento de culpa que tengo me acompañara hasta que me muera.

AR: ¿Había pasado algo entre Francisco y tú los días previos?

No, mi relación con él siempre era igual. Estaba siempre asustada. Me insultaba, se enfadaba, me montaba escándalos, no me dejaba reírme ni mirar a otros hombres. No me preguntes por qué…

AR: Ayer te llamó Juan Carlos Quer…

Sí, a través de Ruth Ortiz. Yo quería participar en esa iniciativa, ser otra persona más para apoyar esta lucha.

AR: ¿Has vuelto a ver a Francisco Medina?

A los dos o tres días de salir libre él, iba con mi padre y me lo crucé en coche. Creí que el corazón se me salía por la boca. Encontrarme con ese bicho después de que asesinara a mi hija…

AR: ¿Cómo es tu vida ahora?

Mi vida está vacía, no tengo vida. Me levanto cada día porque mi hija me da la mano y la otra mano me la da Miguel Ángel. Me levanto por ellos todos los días porque me lo piden. No tengo vida, siempre estoy llorando. No tengo ilusión por nada. Me da igual si es lunes, viernes, sábado. Mi vida es una auténtica pesadilla. Por eso voy a luchar por mi hija y su padre. Es lo único que me queda.

AR: Le dije a Juan Carlos Quer que tras una tragedia así, uno necesita hacer algo. Tu lucha es conseguir que se reabra el caso…

Voy a luchar hasta el final porque esa es mi vida. Tengo un proyecto con siete madres, donde está Ruth Ortiz, Julia, Lidia, Nieves… lo llamamos las luchadoras. Queremos formar una asociación para apoyarnos unas a otras.

AR: No te dejes intimidar. Las mujeres sacan su mayor fuerza en los peores momentos, sigue con tu lucha.