El Programa de Ana Rosa ha averiguado que en la reconstrucción del crimen que se realizó en el piso de León XIII, por petición del juez instructor del caso, Francisco de Asís Molina, ha contado con la colaboración de la policía científica de Madrid. Este cuerpo ha llevado un aparato llamado Láser Scanner, que graba en tres dimensiones.
Durante las cuatro horas que los acusados reprodujeron sus movimientos han sido registradas por esta máquina que puede, según ha explicado Nacho Abad, grabar volúmenes, alturas y distancias, para poder contrastar estos datos con las manchas de sangre de Marta aparecidas la colcha y sentenciar si el testimonio de los acusados es veraz.
De todas formas, sigue habiendo contradicciones. Para Nacho Abad, si hay estrangulamiento, como dice ahora Miguel, asesino confeso en primera instancia, por parte de El Cuco: "no puede aparecer entonces sangre de Marta en la cazadora de Miguel, ni manchas de sangre en la colcha". Y sobre este punto, ha querido dejar una cosa muy clara: "el fluido de El Cuco encontrado en la mancha de sangre de Marta que hay sobre la colcha, no es ni de sangre ni de semen".
Eso sí, sangre de Marta, según su información, hay tal cantidad que no puede proceder un corte facial, como habría dicho Miguel en su nueva declaración, sino que le consta se surgió de una herida más profunda.
El vertedero
En consecuencia, el juez ha ordenado que se interrumpan las labores de tratamiento de residuos del vertedero de Alcalá de Guadaira, donde se supone que habría ido a parar el cuerpo en el caso de ser cierta la nueva versión de Miguel Carcaño, donde decía que lo habían arrojado a un contenedor cercano al piso de León XIII.
El Programa de Ana Rosa ha investigado cómo funciona esta planta. Laura Lobo se ha desplazado hasta allí y ha averiguado que, diariamente, pasan 1.300 toneladas de basura. Es decir, desde que Marta desapareció, 70.000 toneladas han pasado por estas instalaciones.
"Desde un foso, la basura llega a una gran lavadora con agujeros de 15 cm. de diámetro que hacen una especie de centrifugado para que la basura, según su tamaño, pase a una cinta transportadora donde unos obreros separan a mano los residuos orgánicos de los inorgánicos y un imán se queda con los metálicos. Los primeros se entierran para que desaparezcan", ha contado la reportera.
El menor cumpliría una pena mínima de asumir el crimen
Nacho Abad se ha mostrado un tanto desesperanzado con esta nueva búsqueda. Comparando con el caso de Mari Luz, a la que se buscó en el vertedero sin éxito, se trata de Sevilla, una ciudad que genera mucha más basura que Huelva. Aunque, hay que tener en cuenta, ha puntualizado el colaborador de Ana Rosa, que la capital andaluza lleva un retraso de dos meses en el tratamiento de sus residuos y puede que se la encuentre en el foso donde se acumula esta basura.
Mientras tanto, tanto Nacho Abad como Salvador Ortega, que trabajó en la policía científica y ahora colabora con este programa, coinciden en que el cambio de declaración que llevó a cabo Miguel está pensando estratégicamente, puesto que, al acusar a El Cuco, el menor, de estrangularla, sabe que por su edad cumplirá una pena mínima, han explicado entre ambos.
El camión de la basura y la hipótesis del padre de Marta
El cuerpo, por lo demás, si fue trasladado en el camión de la basura tal y como sostienen los acusados, sólo presentaría síntomas de aplastamiento en algunas partes. Según Ortega, son unos vehículos muy modernos con puerta lateral que aplastan la basura.
Aunque todas estas hipótesis quedan en suspenso después de la información que ha revelado el padre de Marta del Castillo. Antonio del Castillo ha advertido de que el padre de Rocío, la que era novia de Miguel, asesino confeso en el momento de desaparición de la joven, es incinerador de residuos biológicos.
La investigación en el río no cesa
En cualquier caso, la pista del Guadalquivir no se da por desechada. La policía mantiene unas labores de búsqueda mínimas porque no ha abandonado la hipótesis de que pueda aparecer en el cauce. El motivo es, según ha dicho Nacho Abad, que en las versiones iniciales de los involucrados, al reconstruir los hechos, coincidían en que pasaron dos motos antes de arrojar el cuerpo. Es una coincidencia demasiado precisa, piensa el colaborador de Ana Rosa, como para que los investigadores la consideren inventada.