Después de su discusión, Bea tenía claro que no quería irse a dormir sin solucionar las cosas con Rodri. "No me habla y pasa de mí. Me agobio porque no entiendo que tengamos que discutir por tonterías así. No quiero llorar porque no tiene razón", ha explicado en el confesionario. En la cama, la pareja ha hablado y se han reconciliado: "Hoy me he sentido solo. Si veo que la persona que es importante para mí se está descojonando, entiende que me afecte", ha explicado el madrileño.