Esta tarde, Adara y Pol han estado sentados en el sofá buscándose con las miradas y hablando sobre hacer algo en público, suponemos que besarse. Adara ha intentado ese primer beso en el sofá pero el “genéticamente perfecto” ha quitado la cara diciendo, “aquí no”.
Poco tiempo después, se han trasladado a la lavandería de la casa para vivir uno de los momentos más esperados, el primer beso. Adara ha empezado picando a Pol con tres cobras, hasta que éste se ha hartado y se ha marchado, pero ella ha ido detrás de él y le ha arrastrado hacia la misma estancia para darle el primer beso. Tras un par de besos, Pol le ha dicho “mira mi petaca”, refiriéndose a su miembro, y la joven se ha quedado perpleja y ha exclamado: “Eso es desproporcionado, ¿de dónde has sacado eso?” a o que él ha contestado: “mis padres me hicieron muy bien”.