Bruselas propone congelar o rebajar la mayoría de cuotas de pesca en aguas profundas

Bruselas apuesta por reducir los Totales Admisibles de Capturas (TAC) y cuotas para el granadero de roca, con recortes de entre el 15 y el 20 por ciento los dos años, aunque contempla un incremento del 77 por ciento el primer año para esta especie en aguas al oeste de las islas británicas para que los barcos en la zona puedan pescar hasta 4.500 toneladas por año.

Con estas cifras, el Ejecutivo comunitario considera que la especie podrá alcanzar niveles de sostenibilidad en el horizonte de 2015, en la línea de los objetivos que persigue la Unión Europea para una pesca sostenible.

Las otras dos únicas mejoras que defiende el Ejecutivo comunitario en su documento se refieren a un aumento del 20 y del 5 por ciento, tanto en 2013 como en 2014, para dos poblaciones de sable negro en las aguas occidentales (al oeste de Escocia e Irlanda).

La comisaria de Pesca, Maria Damanaki, ha advertido de que "para conservar las pesquerías de aguas profundas debemos seguir los dictámenes científicos y no sobreexplotar las especies más vulnerables". "Tenemos un objetivo claro, el de garantizar una explotación sostenible de los caladeros a largo plazo", ha insistido.

Con este objetivo, y en línea con las propuestas de años anteriores, Damanaki reclama para el periodo 2013-2014 reducciones en 13 stocks y el mantenimiento de las cuotas actuales para otros ocho. No ha presentado propuesta concreta para los tiburones, a la espera de la opinión de los científicos.

En base al principio de precaución, que se aplica a especies para las que no hay datos científicos suficientes sobre su estado, Bruselas apuesta por reducir en un 20 por ciento las capturas de besugo -una de las especies con mayor valor comercial-- y de maruca azul tanto en el primer como en el segundo año.

También ve necesario rebajar otro 20 por ciento en 2013 y en 2014 la cuota para la brótola en todos los caladeros contemplados, mientras que es partidaria de mantener una cuota cero para el reloj anaranjado.

Bruselas ha reiterado con la presentación de esta propuesta las dificultades de los científicos para evaluar el estado de las pesquerías debido a la falta de datos disponibles y fiables, aunque ha apuntado mejoras, que han redundado en "mayores posibilidades de pesca" para las especies bien documentadas, según la Comisión.

Las pesquerías de aguas profundas representan cerca del 1 por ciento del pescado desembarcado procedente del Atlántico nororiental, pero algunas comunidades pesqueras locales dependen de esta pesca, según el Ejecutivo comunitario, que explica que las capturas y el empleo relacionado disminuyen desde hace años debido al agotamiento de las poblaciones.

El pasado julio, Bruselas presentó otra propuesta relacionada con la pesca en aguas profundas cuyo principal objetivo es eliminar gradualmente las artes más agresivas, incluida la de arrastre.