El Ibex 35 cierra con una caída del 1,13%, hasta los 11.030 puntos, y recorta un 0,28% en la semana

En el mercado de deuda, la prima de riesgo se colocaba en 142,1 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 2,265%, mientras que en el mercado de divisas, el euro se intercambiaba a 1,1270 dólares.

Tan solo dos valores han conseguido aguantar el tipo en la sesión de hoy: Endesa, con un avance del 0,35%, y Telefónica, que ha ganado un leve 0,11%. Sacyr se ha erigido como el 'farolillo rojo' de la sesión, con pérdidas del 3,91%, seguido de OHL (-3,24%), Inditex (-2,72%), Acciona (-2,52%) y Grifols (-2,43%).

Salvo Endesa y Telefónica, el resto de los 'blue chips' se han teñido de rojo, liderados por Inditex. Santander ha perdido un 1,44%, Repsol un 1,22%, BBVA un 0,6% e Iberdrola un 0,56%.

En este contexto, el selectivo se ha mantenido en línea con las principales plazas del Viejo Continente, pesimistas al igual que la española: París ha recortado un 1,5%, Francfort un 1,28% y Londres un 0,92%.

VOLATILIDAD SEMANAL

Las constructoras han sido los valores más castigados a lo largo de la última semana, marcada por la volatilidad, siendo OHL (-10%), Acciona (-4%) y FCC (-3%) las más perjudicadas.

El analista de XTB Rodrigo García ha explicado a Europa Press que la incertidumbre de Grecia trae presión vendedora a los sectores más cíclicos "debido al freno que un poco probable escenario de pánico podría suponer para sus posibles proyectos".

También se han visto afectadas por la incertidumbre de los mercados Amadeus, después de que Air France-KLM haya anunciado que está valorando cobrar un gravamen por las ventas de billetes aéreos a terceros a través de los sistemas globales de distribución (GDS).

Por el contrario, Mediaset, con un avance del 3,9%, y Telefónica, acercándose al 3% de revalorización, fueron las compañías que mejor paradas han salido en esta semana bursátil.

TENSIÓN EN LOS MERCADOS

En los últimos cinco días, Grecia ha sido una constante en los mercados, generando volatilidad a medida que se hablaba de un posible acuerdo. "Ahora mismo es una cuestión de confianza, no de plazos", ha apuntado García, quien ha indicado que "si vence un plazo, se pondrá otro, y no pasará absolutamente nada".

"El problema es la tensión y los nervios que esto trae a los inversores, ya que invitan a la prudencia y a frenar el importante ciclo alcista que se llevaba en los últimos meses", ha destacado el experto.

De cara a la semana que viene, la cuestión griega seguirá estando presente en los mercados, entorpeciendo el ciclo alcista de los principales índices europeos. No obstante, García cree que es "complicado" que se perfore la zona de los 10.650 enteros. "Tan solo las buenas noticias desde el país heleno propiciarán que se deje atrás definitivamente el nivel clave de los 11.200 puntos", ha zanjado.