España aportará un avión a la misión contra las mafias en el Mediterráneo que la UE espera lanzar el lunes

"El comandante de la operación está en posición de proponer el lanzamiento de la operación a los Gobiernos", han explicado a Europa Press varias fuentes militares.

Los ministros de Asuntos Exteriores de la UE deberían dar el visto bueno al lanzamiento de la operación, bautizada EUNAVFOR MED, el próximo lunes en su reunión de Luxemburgo salvo sorpresa de último momento, según fuentes militares.

Los tres puntos abiertos para poder lanzar la misión eran la aprobación del plan operativo y las reglas de enfrentamiento, que ya han recibido luz verde por los embajadores de los Veintiocho en el Comité de Política y de Seguridad de la UE y que se espera que sean aprobados formalmente el lunes a nivel de ministros.

El tercer punto que estaba abierto era que el comandante de la operación, el contraalmirante italiano, Enrico Credendino, recibiera suficientes contribuciones de los Estados miembros para recomendarles su lanzamiento, algo que se ha confirmado tras la conferencia de generación de fuerzas de este viernes. "El comandante de la operación había pedido cuatro aviones y cuatro barcos" para la misma, han explicado a Europa Press fuentes militares.

España aportará un avión de reconocimiento para la primera fase de la operación, que se limitará a la recogida de inteligencia sobre las redes criminales y prestar socorro en caso necesario a embarcaciones de inmigrantes en situación de naufragio en aguas internacionales, según han explicado varias fuentes diplomáticas y militares.

Los inmigrantes rescatados por la operación serán desembarcados en Italia o en caso de emergencia en Malta, como ya es la práctica en el caso de la operación de Frontex en el Mediterráneo, Tritón.

Alemania aportará por su parte una fragata y un segundo buque de apoyo a la misión, a la que Italia, que asume el mando de la operación, también contribuirá un buque, según fuentes diplomáticas y militares consultadas. Reino Unido o Italia podrían aportar aviones no tripulados o drones, según han explicado fuentes militares.

OPERACIÓN POR FASES

Según una fuente de alto nivel europea, los aviones y buques podrían estar desplegados en la zona de operaciones en el Mediterráneo en el plazo de "una semana" desde el lanzamiento formal de la misión, algo que competerá decidir a los ministros de Exteriores el lunes en la reunión, a la que por parte española acudirá el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ignacio Ybáñez.

Los ministros de Asuntos Exteriores y de Defensa de la UE acordaron el pasado 18 de junio establecer una operación naval militar para contribuir a desmantelar las redes de tráfico de personas en el Mediterráneo sin excluir la posibilidad de destruir las embarcaciones y otros activos que utilizan las mafias aunque sólo si la ONU lo autoriza o lo consienten los libios, una posibilidad que ha cuestionado Rusia, país con derecho de veto en el organismo internacional, aunque posteriormente ha acordado aceptarlo si las autoridades libias están de acuerdo.

También ha cuestionado la destrucción de las embarcaciones por su utilidad para el sector pesquero en Libia el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, que participará en el almuerzo del lunes con los Veintiocho para discutir, entre otros, la inmigración y la crisis libia. Su enviado especial, el diplomático español, Bernardino León, trata de lograr que las facciones de Tobruk, reconocida internacionalmente, y la de Trípoli, desde donde parten la mayoría de las embarcaciones de inmigrantes, lleguen a un acuerdo para crear un Gobierno de unidad nacional, que respalde la misión europea y allane la puerta a una mayor implicación de la comunidad internacional sobre el terreno.

La primera fase de la misión, que consiste en la recogida de información e inteligencia para entender la organización y cómo operan las redes de tráfico, no necesita contar con una resolución de la ONU para llevarse a cabo.

Tampoco se necesitaría para la segunda fase, consistente en "el abordaje, inspección, incautación y desvío en alta mar de embarcaciones sospechosas de ser utilizadas para el tráfico de personas y el contrabando" de acuerdo con el Derecho Internacional aunque sí se requeriría en el caso de que se hiciera en "aguas territoriales o aguas internas" del estado afectado, es decir Libia o bien contar con su "consentimiento", de acuerdo con el documento para establecer la misión.

Aunque los Veintiocho evitan expresamente hablar de la posible destrucción de las embarcaciones utilizadas por las mafias, en una tercera fase contemplan "todas las medidas necesarias contra una embarcación o sus activos relacionados" incluido deshaciéndose de ellos o haciéndoles inoperativos "en el territorio de ese país" de acuerdo con las condiciones que se fijen en una resolución del Consejo de la ONU o con el consentimiento del país.

En un escenario ideal la misión trataría de "neutralizar" las embarcaciones "más grandes" utilizadas por las mafias, "antes" de ser utilizadas, es decir, bien en los puertos de Libia o lo más cerca de sus aguas territoriales, según fuentes europeas que han dejado claro que en ningún caso se atacaría embarcaciones "con inmigrantes a bordo".

EL ESTADO ISLÁMICO, IMPLICADO EN LAS REDES DE TRÁFICO

El coordinador antiterrorista de la UE, Gilles De Kerchove, ha constatado esta semana que el Estado Islámico "está implicado" en el tráfico de inmigrantes pero ha asegurado que "no hay pruebas" por el momento de que esté utilizando estas redes criminales para infiltrarse, un temor que preocupa a las autoridades militares europeas, que han admitido que se trata de una operación "compleja".

En cualquier caso, los Veintiocho deberán aprobar por consenso pasar de la primera a la segunda fase y eventualmente a la tercera si llega una resolución de la ONU fase tras una evaluación de la situación.

España no descarta aumentar su contribución a la operación en fases posteriores si hay consenso para avanzar y la ONU respalda la operación europea, según fuentes consultadas por Europa Press. El ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, ya avanzó el pasado 18 de junio la disponibilidad de España para desplegar un buque, un helicóptero y un avión de reconocimiento.

Los Veintiocho también esperan aprobar de manera formal el lunes la prórroga de las sanciones económicas contra Rusia por su intervención en el conflicto en Ucrania seis meses más, hasta el 31 de enero de 2016 y mantendrán una discusión estratégica sobre el refuerzo de las relaciones con los países de Asia.