Lieberman anuncia que Israel quiere prohibir las emisiones de Al Yazira en el país

"Qatar constituye la columna económica de los grupos terroristas más radicales, que están minando la estabilidad en el mundo y en Oriente Próximo en particular", ha valorado, durante un encuentro con su homólogo ruandés.

"Qatar es un actor clave en nuestro actual conflicto con Hamás en Gaza, ya que, entre otras cosas, financia a Hamás y da asilo a Jaled Meshaal (líder del ala política de la formación islamista)", ha agregado.

Lieberman ha cargado duramente contra Al Yazira, una cadena creada y financiada por el Ministerio de Exteriores qatarí. "Al Yazira ha abandonado cualquier similitud con un medio de comunicación creíble y sus emisiones, tanto en Gaza como en el resto del mundo, son una incitación antisemita, mentiras, provocaciones e incitación a los terroristas", ha dicho.

Por último, el ministro ha dicho que todas las principales cadenas internacionales están presentes en el país, y que "muchas de ellas no difunden precisamente propaganda sionista, sino incluso al contrario".

"Como un país democrático, estamos obligados a permitir esto. En el caso de Al Yazira, por contra, no se trata de un tema de medios, sino un problema relacionado con las operaciones de una rama de una organización terrorista que está combatiendo contra el Estado de Israel. Estados Unidos no permitiría que una cadena de Al Qaeda emitiera desde Nueva York", ha remachado.

La cadena qatarí cuenta con un gran peso en el mundo árabe, siendo la más seguida por los espectadores de esta zona del mundo, por delante de la emiratí Al Arabiya. La cadena ha emitido numerosas piezas sobre los levantamientos populares en el mundo árabe y sobre la situación del conflicto palestino.

En los últimos meses ha sido acusada en varias ocasiones de ser parte del aparato de propaganda del Gobierno qatarí y de emitir informaciones destinadas a beneficiar los intereses internacionales del pequeño emirato, lo que ha sido desmentido por la cadena.

Varios periodistas de Al Yazira han sido condenados a penas de cárcel en Egipto después de que un tribunal fallara que habían colaborado con la organización islamista Hermanos Musulmanes, declarada como un grupo terrorista por las autoridades del país tras el golpe de Estado de julio de 2013, que derrocó al entonces presidente electo, Mohamed Mursi.

Qatar fue uno de los países que respaldó con más decisión al Gobierno de Mursi, tanto política como económicamente, y su derrocamiento fue considerado un varapalo para sus aspiraciones de crecimiento regional ante la gran potencia del Golfo, Arabia Saudí, que respaldó al golpista jefe del Ejército y actual presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi.