Fiscalía pide la libertad definitiva de los etarras Imaz y Latasa y la grapo Concepción González

Imaz, dirigente histórico de los Comandos Autónomos Anticapitalistas (CAÁ) disfrutaba hasta este momento del tercer grado penitenciario. Fue condenado, entre otras causas, por participar el 25 de marzo de 1983 en el tiroteo contra un convoy compuesto por cuatro vehículos de la Policía Nacional que regresaba al cuartel de Fuenterrabía en el que falleció el cabo Ramón Ezequiel Martínez y resultaron heridos otros cuatro policías nacionales.

El Ministerio Público también ha recomendado la extinción de las responsabilidades penales de Latasa Guetaria, preso de la conocida como 'vía Nanclares' que se encuentra en libertad condicional, condenado por el asesinato de la ex dirigente María Dolores González Catarain, alias 'Yoyes'. La grapo Concepción González está condenada por participar en distintas acciones de la organización terrorista, entre ellas el secuestro del empresario zaragozano Publio Cordón.

73 PRESOS BENEFICIADOS

La libertad definitiva de estos tres nuevos miembros de ETA y el GRAPO elevaría a 73 el número de presos condenados por asesinato que han sido beneficiados por la Audiencia Nacional desde que el pasado 21 de octubre el Tribunal de Estrasburgo condenara a España a indemnizar a la etarra Inés del Río por aplicarle de forma retroactiva la 'doctrina Parot'.

De ellos, 64 son miembros de la organización terrorista ETA y seis de los GRAPO, a los que hay que sumar el almeriense Pompeyo Miranda, que fue condenado en Bolivia por varios asesinatos, el miembro del GAL Ismael Miquel Gutiérrez y la integrante del Exército Guerrilleiro do Povo Galego Ceive Josefa Rodríguez Porza.