En la misiva, consultada por Europa Press, Manuel también solicita que la orden de Maristas pida perdón a las víctimas, que dimitan las personas que han ocultado el delito y "que digan de una vez por todas la verdad y dejen de hacer padecer tanto a las víctimas como a sus familias".
La carta explica al pontífice el caso de su hijo, la respuesta que le dio el colegio, las actuaciones que ha llevado a cabo para destapar más casos de abusos sexuales y la cantidad de denuncias que hay contra cada profesor del centro.